Grim Fandango

Grim Fandango es una aventura gráfica publicada por LucasArts en 1998. Es el primer juego de LucasArts que utiliza gráficos tridimensionales, y para él se desarrolló el motor GrimE, que sustituyó al anterior SCUMM. A pesar del éxito entre críticos y fans del género (fue elegido por Gamespot Juego del Año 1998), Grim Fandango no se convirtió en un éxito comercial, y muchos interpretaron este fracaso como una muestra más del final de la aventura gráfica, género que ya llevaba unos años en declive.

La historia nos sitúa en el inframundo azteca y abarca cuatro años en la vida (después de la muerte) de su protagonista, Manuel Manny Calavera, en su aventura a través de la tierra de los muertos. El juego se compone de cuatro episodios, uno por cada uno de los años transcurridos, y cada episodio comienza el Día de los Muertos. Precisamente de la temática de la celebración de este día en México es de donde ha salido la inspiración para este juego; de hecho, la mayoría de los personajes son figuras esqueléticas (calacas, como las utilizadas durante el Día de los Muertos en México), basadas en el trabajo del ilustrador mexicano José Guadalupe Posada, y las flores son usadas como herramientas para el asesinato. También nos encontramos con la fauna característica del inframundo: castores de fuego devoradores de huesos y gatos gigantes que se utilizan como medios de transporte.

Estéticamente el juego resulta inusual, ya que combina toda la mitología del inframundo con elementos del Art Deco de los años treinta, y el guión tiene reminiscencias del género film noir. Por ejemplo, la segunda parte del juego, en la que Calavera dirige un club nocturno, se inspira en el Humphrey Bogart de películas como El halcón maltés, Cayo Largo y, por supuesto, Casablanca.

La historia, pues, se centra en Manny Calavera, que trabaja como agente de viajes en el Departamento de la Muerte en la ciudad de El Marrow, donde tiene que expiar los pecados que ha cometido en vida y ganarse su propio billete al inframundo vendiendo paquetes de viajes, que varín entre un rápido viaje en el lujoso tren número 9, de cuatro minutos de duración, hasta una caminata de cuatro años, con la única ayuda de un bastón. El lujo del viaje depende de lo virtuosa que haya sido la vida del muerto, y a mayor virtud, mayor comisión para el agente. Sin embargo, Manny comienza a sospechar que algo no va bien cuando ve cómo se le deniega un billete para el tren número 9 a Mercedes Colomar, su última cliente, a pesar de que ha tenido una vida impecable. Manny se ve obligado a dejarla ir a pie hasta el inframundo, pero decide investigar.

Manny descubre entonces una oscura trama, dirigida por Héctor LeMans, un mafioso que ha comprado el apoyo de parte del personal del Departamento de la Muerte para llevar a cabo sus corruptos planes: están vendiendo los billetes de las buenas personas al mejor postor, que generalmente no es quien lo merece.

Calavera es descubierto y encerrado, pero cuando lo daba todo por perdido aparece otro enigmático personaje: Salvador Limones, jefe de la Alianza de las Almas Perdidas, que lucha contra Héctor LeMans. Limones recluta a Manny y le ayuda a escapar de El Marrow. Empieza así el viaje de Manny para encontrar a Mercedes (Meche), de la que se ha enamorado.

En el camino le acompaña Glottis, un enorme demonio naranja, que trabaja como chófer y mecánico en el Departamento de la Muerte, hasta que es despedido.