La plaza donde se encuentra el Convento de los Padres Franciscanos Mínimos es un buen punto de partida para este primer recorrido por el casco urbano de la población. El edificio del convento se inscribe dentro de un estilo Neoclásico con las características de austeridad en su ornamentación propia de la orden que lo edificó. Tras este primer hito podemos seguir por el centro comercial de Castalla hasta la Plaza del Ayuntamiento.
El Ayuntamiento data del siglo XVII, construido al estilo de la arquitectura civil renacentista. Junto al mismo se yergue un edificio noble perteneciente a la familia Soler construido en el siglo XIX y de estilo barroco ornamental, se conoce popularmente como la "Casa Roja".
La Calle Mayor es la calle de más empaque de la localidad, está jalonada de casas solariegas sobre cuyas fachadas se muestran los escudos nobiliarios de sus propietarios. Al final de la calle nos encontramos con la Iglesia Parroquial. La Iglesia, dedicada a Ntra. Sra. de la Asunción se construyó en el siglo XVII con nave central y seis capillas a cada lado. La Portada data de 1613 y el interior es de estilo neogótico. Fué consagrada por el Beato Juan de Ribera y reconstruida tras la guerra civil, cuando sufrió importantes devastaciones en su retablo y en sus archivos.
Castalla conserva muy bien el casco antiguo, repleto de calles sinuosas y en contínua pendiente hacia el castillo. La calle Tronetes está junto a la Iglesia y es una de las calles más típicas de Castalla con sus casas blancas y piso empedrado, por ella podemos comenzar nuestro segundo itinerario por el casco urbano de Castalla.
Si subimos por las calles del casco antiguo llegaremos a la antigua Iglesia Parroquial de Castalla, la actual Ermita de la Preciosísima Sangre de Cristo. En el lugar estaba emplazada la mezquita musulmana y con la Reconquista fue consagrada a la advocación de la Preciosísima Sangre de Cristo y la Virgen de la Soledad. Es de estilo gótico de conquista ; es sede permanente de la imagen de la Patrona de la localidad.
El Castillo se enclava en la parte más alta del cerro sobre el que se asienta la población, dominándola así como a toda la Foia de Castalla de la que es una de sus imágenes más representativas. Se empezó a construir en 1245 y sufrió distintas reconstrucciones tendentes a reforzarlo ya que su situación estratégica, frontera entre Aragon y Castilla, así lo aconsejaba. En la actualidad se puede visitar esta fortaleza restaurada recientemente.
La "Foia de Castalla", es un ancho valle u hoya orientada hacia el Sureste de la peninsula y rodeada por bloques montañosos destacables dentro de las sierras subéticas que ocupan el Norte e interior de la provincia de Alicante. El término de Castalla ocupa las sierras del Oeste y Suroeste de la Foia, siendo éstas: Sierra de la Argueña (1.228 m.), Sierra de Castalla (1.175 m.), y el Norte de la Sierra del Maigmó (1.296 m.)
Las sierras que están al Este, Norte y Noroeste de la "Foia", pertenecen a los términos de Tibi, Ibi, Onil y Biar, y sus alturas son:El Reconco (1.206 m.), Cenarosa (1.210 m.), Menejador (1.352 m.) y "Penya Rotja" (1.226 m.)
Más de la mitad del término municipal de Castalla es zona forestal muy densamente poblada e indicada para actividades de turismo activo. El senderismo o el cicloturismo son algunas de las opciones para estar en contacto con la naturaleza. Cabe destacar en todas estas sierras, la importante cobertura vegetal, sobre todo en las umbrías, predominando el bosque de pino carrasco y plantas aromáticas como el tomillo, romero, piperela y el rabo de gato.
El aroma de sus valles y la panorámica existente, invitan a adentrarse por algunas de sus sendas y caminos hasta el "Balcón de Alicante" en la sierra del Maigmó, o al paraje del Xorret de Catí, que cuenta con un area recreativa y que dispone de diferente servicios y tipos de alojamiento.
Los amantes al deporte de aventura pueden disfrutar en el "Campament de Fontés", un albergue juvenil muy próximo a la Sierra del Maigmó y enclavado en el paraje de Fontés.