AUTOR: William Shakespeare TÍTULO: La tragedia de Timón de Atenas
COMPAÑÍA: alumnos de Off, escuela de teatro y cine. http://www.offvalencia.com
REPARTO: Leo de Bari (Timón de Atenas), Abraham Climent (Apemanto), David Mallols (Flavio), Idaria Lermo, Amaia Rodríguez, María Mateu, Pedro Granero, Andrea Climent, Julio Santandreu, Salud Martínez, Impar Aladren, Eduard Vázquez, Fernando Hernández, Jairo Mas, María Mocholí e Isabel Mocholí.
FECHA/LUGAR DE REPRESENTACIÓN: 12 de diciembre de 2004, Teatro Off, Valencia.
La puesta en escena de esta obra me ha parecido muy apropiada y muy conseguida. En el escenario; que está a ras de suelo, es decir, no está en alto como en la gran mayoría de teatros, sino que el espectador es el que está algo más alto, podemos ver dos alfombras pequeñas encima de una gran alfombra que ocupa casi todo el espacio y que está enganchada por dos esquinas para poder cambiarla de posición a lo largo de la representación. También hay un candelabro, un cofre, un baúl que hace las veces de banco, hay también un objeto para fumar, parece de estilo árabe. Además hay en escena una bandeja y un paño, en la bandeja hay algunos vasos de hojalata. Este escenario pasa por el salón de la casa de Timón y de algunos de sus “amigos” y senadoras. En lo alto de la estancia se ve una especie de tienda de campaña que al bajarla hará de cueva de Timón.
Timón viste una camisa marrón y una estola de leopardo, lleva también una chaqueta peluda. En su mano lleva puesto un gran anillo muy brillante. Una característica que me ha gustado mucho del actor que interpretaba a Timón de Atenas es que era argentino y por lo cual tenía acento argentino. Al final de la obra Timón va vestido con una camisa blanca y lleva el pelo despeinado. Flavio, el buen intendente de Timón, va vestido con un traje negro y camiseta negra. Lleva un fajín color granate. A ratos se pone un gorro negro. Alcibíades viste una levita negra de cuero y botas negras. Como adorno lleva una banda dorada y dos medallas. Al ser capitán de las tropas atenienses lleva una espada. El actor que encarna a Alcibíades cometió un error en una de sus frases, en vez de decir enemigos dijo amigos (realmente un fallo que si no lo hubiera corregido hubiera quedado bastante extraño el diálogo). Apemanto lleva puesto un hábito como los de los monjes pero en gris marengo, de cinturón lleva como un trozo de cuerda. Consigo lleva en la mano un tipo de hueso o algo parecido en forma de pico. Apemanto se mueve algo curvado y como si tuviera una leve cojera.
Los cambios de escena los hacían los propios personajes: cambiar de posición la alfombra, poner los taburetes en otro lugar del escenario, etc. La iluminación cambiaba en cada escena, la luz que había era de color blanco y al final se volvió un poco más amarillenta. En algunos momentos de la obra, sobre todo en los cambios de escena, sonaba de fondo música, en uno de los momentos la música debía ser árabe.
La obra me ha gustado mucho y la representación me ha parecido muy buena y bien hecha teniendo en cuenta que la ha representado alumnos de teatro y cine que se supone que están todavía aprendiendo. También hay que tener en cuenta que la obra de Shakespeare me la había leído antes de ir a ver la representación y por ello la obra es mucho más fácil de entender y seguir. Me parece que han elegido muy bien el decorado y el vestuario. Es una obra que recomiendo que se vaya a ver. Además la trama ocurre también en nuestros tiempos, hay mucha gente (casi siempre con mucho dinero) que se cree que está rodeada de amigos y lo que tiene a su alrededor son sanguijuelas y aduladores que solamente quieren dinero.
La desesperación de Timón es extrema ya que pasa de ser un hombre bondadoso y algo tonto al no darse cuenta de la situación que tiene alrededor, a ser una persona que odia al ser humano y todo lo que le rodea.