El palacio de Buckingham
El palacio de Buckingham es la residencia oficial de la monarquía británica, y se alza entre el pesado tráfico del centro de Londres y el complejo de parques compuesto por
St. James y Green Park.
Cuando fue construido, se trataba de una pequeña mansión comprada por el rey Jorge III para su mujer, la reina
Charlotte. En 1826, Jorge IV encargó al arquitecto John Nash que la remodelara y, once años después, la reina Victoria se instaló en el nuevo palacio. Actualmente, en el palacio reside la reina Isabel II con su esposo el príncipe
Phillip, ya allí recibe a dignatarios e invitados oficiales. El palacio permaneció cerrado al público hasta 1993, cuando la reina Isabel II decidió abrirlo para recaudar dinero para reparar el castillo de
Windsor, que sufrió graves daños durante un incendio. Desde entonces, los turistas pueden visitarlo durante los meses del verano, cuando la reina toma sus vacaciones en el castillo de
Balmoral, en Escocia. En las salas se pueden encontrar las obras de arte coleccionadas o encargadas por la sucesión de monarcas de artistas como
Rubens, Rembrandt, Canaletto, y Vermeer. También se organizan exposiciones cada verano. En las afueras del Palacio, el tradicional cambio de guardia es observado y fotografiado por miles de turistas cada día. Grandes puertas de hierro conducen hacia el parque de St James, uno de los parques más agradables de Londres, donde se puede caminar por entre los lagos con vistas hacia el Palacio.