Tras leer detenidamente dichas obras de teatro, llegamos a la conclusión que, según el autor del que estemos hablando, tanto para un sector de la sociedad como para otro, siempre ha habido un trato diferente para la mujer. Es decir, en Look back in anger el autor nos muestra una historia en la que una mujer pasa su vida a merced de las necesidades y caprichos de su marido, y pese a que comparte vivienda con un amigo de ambos, su facultad de mujer es la que la condena a preocuparse tan solo del bienestar de estos dos, y por supuesto, a limpiar y prepararles la comida y las múltiples raciones de té que se toman éstos cada día.

A mi parecer, una mujer no debería soportar dicho suplicio, y mas siendo tratada de la forma que lo es por su marido. Después de la vida que le ha dado (él a ella), tras marcharse ella del hogar y perder a su hijo, opino que lo último que yo haría es volver con él, ya que aparte de que ella ya sabe la clase de vida que éste le daba, no debería permitir que siguiera así, debería tener un poco de amor propio y terminar con eso.

Sin embargo el autor decide acabar de este modo la historia, y aunque no me parece muy correcto, cabe reconocer, que aún hoy en día, y por desgracia, estas situaciones continúan vigentes.

Por otro lado, e intentando comparar este mismo tema, se puede observar en la obra Waiting for Godot, que el autor ni tan siquiera ha incluido la figura de la mujer en la obra, siendo así que todos sus personajes, a parte de ser hombres, se mantienen pendientes de un hilo muy fino en su estatus social, atreviéndome a decir que al no tener apenas medios para alimentarse a veces no recuerdan ni tan siquiera a quien han visto el día anterior ni tampoco qué hacen esperando a un tal Godot, cuando realmente no saben quién es ese tal Godot.

Ambos personajes (los de las dos obras) no viven de la forma que les gustaría, ya que su situación social es bastante mala, pero debemos diferenciar en ellos que el autor de esta segunda obra pretendía usar tal vez la metáfora del “personaje” Godot para que cada lector pensara en la posibilidad de que éste fuera Dios, la muerte, algo que esperamos en nuestra vida, o la simple esperanza de algo.

Finalmente en la última obra, The kitchen, los personajes tienen una situación social media, en la que cada uno, tanto hombres como mujeres, trabajan unidos en un restaurante para poder ganarse la vida de una forma digna.

El autor de esta obra utiliza desinteresadamente y por igual un personaje masculino como uno femenino, ya cada uno de ellos trabaja igualmente en dicho lugar y puede desempeñar de la misma forma las funciones que hacen los demás.

Así, sabiendo que Look back in anger es más reciente que las otras dos, me puedo atrever a decir que había menos censura que cuando se escribieron las otras dos obras, o que aunque antes también existían estos problemas, no se podría escribir sin tapujos acerca de estos, y en esta obra el autor escribió a cerca de la relación de estos personajes, es decir, de la mujer siendo ama de casa y ocupándose tan solo que al bienestar de su marido.