Metateatro y referencias en la obra de Tom Stoppard

 

Carlos Rubio Alcalá- Grupo B

 

            La obra de Tom Stoppard tiene una serie de recursos, temas y hasta personajes que se repiten y que la vuelven especialmente reconocible. Uno es la facilidad con la que recurre a juegos de palabras. Otro el sentido del humor y la parodia que impregna los diálogos de los personajes. El que vamos a tratar aquí es el de las referencias a otros autores literarios, muy frecuentes en Stoppard, y en especial aquéllas que se centran en el metateatro, es decir, teatro dentro del teatro.

            Estas referencias tienen su razón en los intereses dramáticos del autor: cruzar y multiplicar los niveles de ficción, usar simultáneamente marcos de referencia externos e internos a la realidad y la representación teatral (ambos hechos conducen al metateatro), y crear unas obras dramáticas de fuerte carga intelectual, en las que a menudo los aspectos técnicos o lingüísticos de una obra son anteriores a su argumento o sus personajes, como por ejemplo en el caso de Jumpers (1972). A esto se suma su pasión por los argumentos contradictorios y la relatividad inherente a todo punto de vista, que hace discutir a sus personajes; dilemas sobre los que el autor declaró en varias entrevistas “no conocer la solución”. Un ejemplo lo tenemos en The Real Thing (p.59-65), con la conversación entre Henry y su hija Debbie. Todo ello acerca el teatro de Stoppard más al de Samuel Beckett o Luigi Pirandello (sobre todo en la metaliteratura de Seis personajes en busca de autor) que al de otros británicos como Edward Bond, más cercanos al realismo.

            La primera gran referencia a otro autor y a la vez ejemplo de metateatro la encontramos en Rosencrantz and Guildersten are Dead (1967). Aquí el autor referenciado es William Shakespeare, y su obra Hamlet. Además de que todos los personajes que intervienen en la obra de Stoppard están sacados de la de Shakespeare, las referencias se extienden a fragmentos enteros de Hamlet que aparecen, o incluso se parodia lo que ya para Shakespeare era humor, como por ejemplo la confusión entre Rosencrantz y Guildersten (Hamlet, p.99; Rosencrantz and Guildersten are Dead, p.14). Tomando como objetivo principal del estudio la aparición del metateatro, es en esta obra en la que aparece hasta sus últimas consecuencias. Hamlet contiene el que es con toda seguridad el ejemplo de metateatro más famoso de la literatura universal: la representación de los actores ante el Rey y la Reina. Pues bien, Stoppard va mucho más allá: los espectadores asisten a la representación de una obra de Stoppard que contiene la representación de Hamlet, que a su vez contiene la representación incluida en ésta última. El metatetatro aparece con frecuencia en la época de Shakespeare porque se había alcanzado un grado tan grande de perfección formal que se pueden permitir realizar estos juegos autorreferenciales. Otro autor inglés contemporáneo que referencia a Shakespeare es Edward Bond, con su obra Lear.

            Además, en Rosencrantz and Guildersten are Dead, hay otra referencia evidente a otro dramaturgo: Samuel Beckett. Las interminables conversaciones entre los protagonistas, las sensación de que sólo se tienen el uno al otro, aunque a menudo ni se entiendan entre ellos…: todos esos elementos traen a la mente inmediatamente a Vladimir y Estragon, de Waiting for Godot.

            La siguiente obra en la que reaparece el metateatro es The Real Inspector Hound (1968): en esta obra el inspector Hound llega para resolver un crimen. Sin embargo, a la vez que el público, hay un grupo de críticos teatrales que están contemplando y comentando la obra, por lo que nos encontramos dos planos de representación: la de la obra general de Stoppard y la de la obra que comentan los críticos. El autor, como siempre, lleva su juego aún más lejos, y en un cambio de perspectiva, funde esos dos planos en uno solo: suena el teléfono y la llamada es para uno de los críticos de la obra.

            Pero Tom Stoppard no es sólo un autor teatral, sino que ha escrito guiones para cine, televisión y radio, adaptando en muchas ocasiones sus propios textos, que adquieren así un carácter provisional. Tras The Real Inspector Hound, escribe para la radio Albert’s Bridge, con una referencia a un autor no teatral que nadie parece haber advertido. En esta obra, un suicida harto del mundo sube al puente para matarse. Sin embargo, el cambio de perspectiva que esto supone le hace ver la vida de otro modo, por lo que vuelve a bajar del puente decidido a no suicidarse. Pero al volver al suelo, recupera su antigua perspectiva, y con ella, el deseo de quitarse la vida. De la misma forma, en el cuento de Jules Verne El doctor Ox o la ciudad oxigenada, la gente vive en un permanente mal humor y desconsuelo hasta que suben al campanario de la iglesia, desde el cual ven su existencia de una manera que les hace recuperar el buen humor. Al bajar, claro está, vuelven al estado anterior.

            Jumpers (1972) supone un punto de inflexión en la carrera literaria de Stoppard. A menudo se utiliza esta obra para separarla en dos etapas: una primera en la que predomina el carácter paródico y caricaturesco, y en la que los recursos teatrales están por encima de la historia que se pretende contar; y una segunda en la que las obras se vuelven más serias, y en la que la concepción de la historia y los personajes precede a la realización en forma de pieza teatral. En la propia Jumpers no encontramos metateatro, pero sí otros rasgos que tienen que ver con la experiencia teatral de Stoppard.

En Artist Descending a Staircase (1972), producida en origen para la radio, se produce un fenómeno similar al metateatro, que podríamos denominar “metarradio”: la muerte del protagonista está grabada en una cinta, que escuchamos dentro del mismo programa en el que se escucha el resto de la obra. En On the Razzle, el texto se adapta de otro autor: Johann Nestroy.

            En 1974, Stoppard publica una obra en la que las referencias a otro autor de teatro y el metateatro están profundamente entremezcladas: se trata de Travesties. Por un lado aparecen personajes reales: Lenin, James Joyce…, pero es que además toda la estructura de la obra es la de The Importance of Being Earnest, de Oscar Wilde, de donde viene el proceso metateatral y referencial.

            Con Dogg’s Hamlet, Cahoot’s Macbeth (1979), Tom Stoppard regresa al terreno de las referencias a Shakespeare, volviendo a Hamlet e incorporando Macbeth. En esta obra, el autor parte de la teoría de que el lenguaje no sólo registra la realidad, sino que la transforma. Para él, las palabras son como ladrillos, que también aparecen físicamente sobre el escenario.

            En The Real Thing (1982), reaparece el metateatro más clásico: vemos escenas de la obra “House of Cards” que escribe el protagonista, Henry.  Además está la adaptación para el teatro del libro que escribe el personaje de Brodie. En esta obra, Stoppard se usa a sí mismo como referencia, a través del personaje de Henry, que también es escritor de teatro, y también comparte su amor por los juegos de palabras (“What free love is free of, is love”, p.63) y por las palabras en sí: “I don’t think writers are sacred, but words are. They deserve respect. If you get the right ones in the right order, you can nudge the world a little”, p.54.

            Así pues, mediante todos los ejemplos vistos hemos recorrido la trayectoria literaria de Tom Stoppard, reconociendo en ella que, en efecto, tanto los homenajes o parodias a otros autores, así como el fenómeno metateatral son frecuentes y esenciales para comprender la obra de este autor.

 

 

Bibliografía

Entre corchetes aparecen las referencias exactas de artículo y página utilizadas para este trabajo.

 

STOPPARD, T. Rosencrantz and Guildersten are Dead. Samuel French, Londres, 1967

STOPPARD, T. The Real Thing. Faber and Faber, Londres, 1982

STOPPARD, T. The Real Inspector Hound. Faber and Faber, Londres, 1968

SHAKESPEARE, W. Hamlet. Espasa, colección Austral, Madrid, 1994

CAMBA, J. La ciudad automática. [p. 79-82]. Espasa, colección Austral, Madrid, 2003

TERUEL POZOS, M. Tom Stoppard. La escritura como parodia. Publicaciones de la Universidad de Valencia

VV.AA. Historia de la literatura. Vol. VI. El mundo moderno:1914 hasta nuestros días. [p.207-208]

VV.AA. Contemporary Dramatists. [Felicia Hardson Londré, p.636-640], St James Press, 1993 (Fifth Edition).

VV.AA. Concise Dictionary of British Literacy Biography. Vol VIII. Contemporary Writers, 1960 to the present.[p.369-388], Gale Research International.

 

Fuentes en Internet

 

http://www.geocities.com/stoppard2004

http://www.imagi-nation.com/moonstruck/clsc46.html

http://www.sff.net/people/mberry/stoppard.htp