Dirección: Carlos Saura |
Guión: Ray Lóriga |
País: España-Francia |
Año: 2004 |
Duración: 106 minutos |
Género: Drama |
Interpretación: Juan Diego, Victoria Abril, José Luis Gómez, Eulalia Ramón, Yohanna Cobo, Oriol Vila... |
Siempre permanecerá el dolor
Rencor. Odio. Muerte. Matar. Matar. Morir. Antes, matar. La lucha por las tierras, esa historia enclavada en la "España profunda" de las novelas de principio de siglo es el motivo de los enfrentamientos entre dos familias de un pueblo de Extremadura. Recuerda a las obras lorquianas de pasiones y sangre.
"Todo empezó como una historia de amor" cuenta la voz en off del filme, Isabel Jiménez (Yohanna Cobo). Luciana Fuentes (familia Izquierdo en la historia real) se quedó loca, loca y sola, loca de amor. Fue el principio de un odio creciente con el paso del tiempo, un odio que a pesar de la distancia nunca desapareció. Las dos familias jugaron sus cartas, y las dos salieron perdiendo.
Un magnífico guión (de la mano de Ray Loriga) y unas brillantes interpretaciones son las mayores bazas de este largometraje. La poesía denostada en la narración en off se entremezcla con los diálogos: "con el ajuar doblado y el corazón herido", "se le secó la sangre y se volvió aún más loca"... dice Isabel de Luciana tras el rechazo de su tío Amadeo. Sorprende Victoria Abril como Luciana. El odio y la locura se reflejan en su cara. No deja lugar a dudas. Más que creíble. Juan Diego no se queda atrás. Su papel de Antonio Fuentes le valió una nominación a los Goya. Ana Wagener (Ángeles), José Luis Gómez (Emilio) y Ramón Fontseré (Jerónimo) completan el reparto de los hermanos Fuentes.
Los crímenes de Puerto Hurraco (1990, Extremadura) debido a la repercusión mediática es un acontecimiento conocido por el gran público. Quizá este sea el mayor obstáculo que su director, Carlos Saura, deba salvar. Es un hecho muy conocido que puede defraudar porque tal vez no sea fiel a la historia. Nada más lejos. La historia está contada con toda su crudeza, pero con las elipsis necesarias para no hacer lento el ritmo del largometraje. En todo momento tiene vida, la atención se mantiene. En ocasiones hay momentos en los que parece que cuenta cosas que no sean útiles en el desarrollo de la película como puede ser la escena en la que las hijas de los Jiménez bailan y cantan una canción del grupo Mecano. Esta secuencia hace comprender que ellas no son herederas del odio existente entre las dos familias. Ellas viven ajenas a lo que pasó cuando aún ni siquiera habían nacido.
Pero el resentimiento explotó. Un domingo los hermanos Fuentes se presentaron en la plaza del pueblo con la escopeta cargada de balas y su corazón lleno de odio. Murieron 9 personas, entre ellas, dos de las niñas de los Jiménez, Antonia y Encarna. El rencor es hereditario.
¿Por qué las cosas malas siempre pasan el domingo? Porque al séptimo día, Dios dejo desprotegido el mundo, descansó. Así es cómo su guionista justifica el título del filme.
Gemma Sanchis |
Noa de la Torre |
Sara Mut |
Verónica Martos |
Yolanda Cano |