Profundización de la novela de Henry Rider Haggard.

Las minas del rey Salomón.
 

   Fue la novela de Henry Rider Haggard, la primera que sirvió de argumento al primer filme africano que no tenía por protagonista a Tarzán.
   Su novela Las minas del rey Salomón se publicó en 1885, y se convirtió rápidamente en un auténtico best seller, el cual fue traducido
a casi veinte lenguas.
   Haggard había viajado en 1875 a Sudáfrica, cuando contaba con 19 años ,donde permaneció hasta 1881.Durante su estancia en los territorios de la entonces colonia británica fue testigo de las guerras zúlues contra bóers y británicos, y en 1881 su granja de Transvaal sirvió como escenario para la firma del acuerdo que ponía fin a la primera guerra anglo-bóer.
   De regreso a Inglaterra,donde empezó a trabajar como abogado, y asombrado por el éxito editorial que supuso la publicación de La isla del tesoro, de Robert Louis Stevenson, decidió utilizar todos los conocimientos, que había adquirido en su estancia en el país africano, ya que ese sentimiento que le lleno por dentro era tan grande que decidió
plasmarlo en sus novelas.
   La primera que escribió fue Las minas del rey Salomón, lo que le llevó a igualar en ventas y superar en popularidad a Stevenson.
   La carrere literaria de Haggard continuó con una buena serie de títulos más, y en su tiempo fue considerado un escritor de talla parecida a la de Kipling, el cual fue un gran amigo suyo. Los dos fueron los representantes del espíritu literario del Imperio Británico en pleno éxtasis de la era victoriana.
  Las minas del rey Salomón tenía por proyagonista a Allan Quatermain,
inspirado en un legendario personaje real, Frederick Selous.
   Frederick Selous fue hijo de una noble familia inglesa que se marchó a África con 19 años para imitar las azañas de su admirado Livingstone .
   Selous fue durante decenios el prototipo de romántico aristócrata inglés dedicado a la aventura y a la caza. Su figura atrajo hacía África a otros nobles jóvenes deseosos de acción, como Denis Finch-Hatton, que fue amante de Isak Dinesen y a quien la escritora inmortalizó en su libro Lejos de África.
 

Regresa al ÍNDICE