Fallas (15-19 de marzo) Estas fiestas terminan la madrugada del 20 de Marzo, y empiezan el fin de semana siguiente. Oficialmente comienzan el 15 o el 16 de Marzo con la "plantá", que es el montaje de los monumentos o Fallas, hechos de cartón, verdaderas obras de arte, que cuestan varios millones de pesetas. Terminan con la cremá (quema) de éstas en la noche de San José. Pero la preparación de la fiesta del siguiente año es tán laboriosa, que los encargados o Falleros deben de reunirse por lo menos un par de veces al mes, para discutir entre paella, butifarrá y cachondeo, a qué político pondrán en la Falla y qué comerán en la próxima reunión. En Noviembre y Diciembre se realizan las diferentes presentaciones de cada Falla. En la semana Fallera de Marzo hay en las calles un festín de música, pólvora y colorido. Las Fallas y la Paella (el plato más exuberante del mundo) reflejan el singular carácter valenciano.


Hogueres o Fogueres de San Juan (22-24 de junio) Dénia está situada entre Valencia y Alicante, a igual distancia de una y otra (95 km). De Valencia nos viene celebrar las Fallas, y de Alicante les Fogueres que viene a ser una celebración similar. Al parecer les Fogueres era un rito que se celebraba en toda España, desde muy antiguo. En una época dominada por la superstición, era costumbre quemar todo lo viejo en la noche de San Juan, el 24 de Junio. Hoy lo viejo se ha sustituído por hermosísimos monumentos de cartón, aunque hay gente de Dénia que lo celebra a la antigua, quemando trastos viejos, como en la típica calle de Les Portelles. Yo recuerdo participar en dos hogueras, una en la calle Colón y otra en les Portelles, aunque las había por casi todas las calles de la ciudad. Era costumbre saltar la hoguera, y más de uno se ahorraba así ir al peluquero. Estas fiestas duran también unos tres días, aunque por "culpa" de los preparativos se extienden como las de San José durante todo el año.

Santísima Sangre (2º sábado al 3er domingo de julio) Durante el segundo fin de semana de julio y los siguientes siete días, se celebran las fiestas mayores de la ciudad, dedicadas a la Santísima Sangre, en conmemoración al milagroso fin de una epidemia en 1633. Era la época del venerable Fray Pedro Esteve, el popular Pare Pere, el hijo más querido de nuestra ciudad. Según la tradición repartió pan bendito entre los enfermos y todos quedaron sanos. Enamorado de su tierra, del Montgó en particular, su humilde personalidad era de un calibre tal, que todavía se le guarda un afecto y devoción sin límites entre todos los dianenses. Estas fiestas comienzan con el encierro de los toros; algo parecido a los sanfermines, solo que aquí somos "más valientes" y vamos detrás, persiguiendo a los toros. La callejonada termina en la plaza de toros montada en el puerto de Dénia. Es una plaza singular, pues tiene forma de media elipse cortada por el mar. La gracia consiste en que el toro tome un baño (muchos descubren que los toros nadan), y para ello los atrevidos lo engañan con su cuerpo vestido con un taparrabos como traje de torero. Esta fiesta torera, que ha sido declarada de interés nacional, se repite todos los días, mañana y tarde. Hay un sinfín de actividades deportivas: regatas, pesca, carrera de bicicletas, fútbol, baloncesto, etc. También proliferan las actividades culturales: conciertos, recitales, exposiciones... Se invita a todos los concurrentes a participar, sobre todo a los pequeños (cucañas infantiles). Hay degustación de vino y paella (después de un disputado concurso) y verbenas populares. En su aspecto religioso, se debe ir a la casita del Pare Pere, no perderse la procesión de la imagen de la Santísima Sangre y el reparto del pan bendito. La apoteosis llega con las carrozas o "batalla de flores", en la que se reparten premios para los mejores carros alegóricos y comparsas, lo que origina otra batalla (ésta verbal) entre los que se consideran afectados y el jurado. Todo termina la noche del domingo con un espectacular castillo de fuegos artificiales desde la escollera del puerto; uno no sabe si mirar hacia el cielo o el mar, donde se refleja el resplandor de las guirnaldas.

Feria de Noviembre (20 de octubre - 10 de noviembre) Al igual que otros muchos lugares, este tipo de fiestas se dan al acabar las faenas y la temporada del campo, o como recuerdo de aquellas celebraciones. En Dénia ya no hay temporada de las pasas, pero se continúa la tradición de la fiesta. En aquellos tiempos la gente aprovechaba para comprar ropa, objetos diversos, dulces, y juguetes para los niños. Los dianenses estrenaban trajes y vestidos. El dinero abundaba si la cosecha había sido buena. Junto a los puestos de mercaderías se colocaban tiovivos y columpios para los pequeños. Todavía hace unos pocos años predominaban los puestos de comercios feriantes sobre los de diversión. En la actualidad estos últimos dominan, y los artículos a vender se limitan a dulces y golosinas. La feria comienza la última semana de Octubre y termina a principios de la segunda semana de Noviembre.

Romería de Sta. Lucía (13 de diciembre) El día 13 de Diciembre se celebra en honor a Sta. Lucía una romería hasta su ermita, situada en la zona de Los Campussos, a las faldas del Montgó. Desconozco desde cuándo arranca esta tradición, que es antiquísima. Después de comer van afluyendo, por la carretera de Los Campussos, los romeros camino de la Ermita. En los alrededores de ésta se sitúa el "porrat", conjunto de tenderetes donde venden garbanzos empolvados (porrat), dátiles, castañas, turrón, y otras golosinas. Se celebra una misa y se cantan los gozos. Luego desfilan ante la imagen de la Santa, poniendo a sus pies un cirio, y tocan los ojos con un pañuelo o una estampa. Esta romería está muy arraigada en el pueblo de Dénia.

San Roc. Moros y Cristianos (9-16 de agosto) La devoción a San Roque en nuestra ciudad arranca en el siglo XV con la construcción de una ermita. La fiesta, junto a las del Corpus y la Asunción, era una de las tres más importantes. En aquellos años San Roque era considerado el "abogado contra la peste", y la devoción a este santo creció cuando la gran plaga de 1647 asoló España respetando muy pocos lugares, entre ellos Dénia. El 15 de agosto de 1663 se inauguró una nueva ermita que, por defectos de construcción, se vino abajo 20 años después. Sobre los restos se construyó la actual iglesia de La Asunción. Desde hace 20 años, en la tradicional semana festiva, se celebra también las fiestas de Moros y Cristianos, de gran tradición en otros lugares de la Comunidad Valenciana. Sin embargo, Dénia tiene el honor de ser pionera también en estas fiestas, ya que aquí se celebraron por primera vez en 1599 con motivo de la visita del rey Felipe III. El propio rey nos sirve de cronista de aquella fiesta: "la ciudad (de Alicante) envió a la villa de Dénia en el mes de febrero deste año hallándome yo en ella cinco barcos armados en forma de galeotes con la chusma vestida a la morisca... con algunos caballeros de la ciudad que los acompañaron con orden de que asistiesen allí a lo que se ofreciere de mi servicio como lo hicieron con todo gusto mío". Entre los acompañantes del rey figuraba Lope de Vega quien compuso un poema en alabanza de dichas fiestas. También fueron sonadas unas fiestas de Moros y Cristianos celebradas en julio de 1820 al instaurarse el gobierno constitucional. Estas fiestas de Moros y Cristianos tienen su origen en la lucha que mantuvo el caudillo moro Al-Azraq "El blavet" (por sus ojos azules) contra las huestes de Jaime I y su hijo Jaime II. Al-Azraq era un moro (¿?) vecino de nuestra comarca, de La Vall d'Alcalà. En este pequeño pueblo, joya de nuestra Marina Alta, se le considera un héroe por una interesante forma de ver la historia. En efecto, no hay que olvidar que estas tierras estaban habitadas desde hacía cinco siglos en convivencia pacífica por moros, judíos y cristianos, y Al-Azraq las defendía de un conquistador. Tras algunos años de treguas y escaramuzas, Al-Azraq se puso en pie de guerra con la intención de reconquistar Valencia, apoderándose previamente de Alcoy y Játiva. En esta empresa iba a contar con la ayuda de un ejército proveniente de Africa, pero la impaciencia le hizo caer en un engaño y se adelantó a estos refuerzos, muriendo en las murallas de Alcoy cuando pretendía conquistar esta ciudad.

Otras fiestas: Mig Any, Carnaval, Santísima Trinidad, San Vicente Ferrer, San Antonio Abad (el del porquet), Virgen de los Desamparados, San Pedro, San Agustín, y las fiestas que celebra la numerosa colonia andaluza en honor a la Virgen del Rocío y las procesiones de la Semana Santa. Algo digno de figurar en el libro Guiness de los "records".