PIROPOS
Piropos elogiadores. Levantan la autoestima de las personas y les permiten hacer volar su imaginación.
Piropos zafados. Comienzan dulcemente, enternecen el corazón, pero cambian drásticamente entorpeciendo al amor.
Piropos clásicos. Clásicos, tradicionales, conocidos por el público y la crítica son aquellos piropos que alguna o varias veces hemos escuchado.
Piropos amorosos. Son aquellos que estremecen el corazón al escucharlos y nos provocan un romanticismo inesperado.