Lucía
es nuestra abuelita particular. Entre enormes cacharros nos prepara comida
como la de antes. ¡Qué tiempos, mamá! Aquellas lentejas,
aquellas alubias o aquel arroz al horno. ¡Cuánto se hecha de
menos! Pero no hay problema, entre morcillas, chorizos y huesos de corbet...
ahí encontramos a Lucía siempre dispuesta a hacernos un exquisito
y extrañado plato de caliente. Recordamos que plato de caliente no
es todo aquel que pasa por el microondas
Los
libros quitan mucho tiempo, pero dan mucha cultura...
o eso dicen. El caso que entre unas cosas y otras los estudiantes nos quedamos
frente a frente con los fogones. Ante esto, Ana tiene la solución:
el MICROONDAS. Glorioso invento donde los haya es una extensión del
cuerpo del estudiante. Si con las facilidades que nos da Ana no podemos
no pasa nada, siempre hay un chino o un McDonalds donde acogen a todo el
mundo
Venida
desde Italia... En realidad desde mucho más cerca. Sin embargo, a Bea,
nuestra italiana particular, no le ha hecho falta pasarse por ese país
para manejar sin problemas salsas, macarrones, raviolis y lo que se le ponga
por delante. Conoce todos los secretos de la pasta que tan rápidamente
nos sacan de apuros. ¿Quién no sabe hacer unos spaguettis a
la carbonara? Pues si no sabes para que son esos fideos largos, para eso está
Bea que es la que maneja la pasta
¿Carne?
¿Pescado? Aqui no discriminamos a nadie. Todos están invitados
a la cazuela de Mireia. Nadie está a salvo en la cocina de Mireia.
Todo lo que coge lo echa en esa sartén. Que más da... lo que
no mata, engorda. A pesar de todo, son recetas suculentas y más sofisticadas
que puedes hacerle a tu mamá. Te aconsejamos la hamburguesa sorpresa.
Con esta receta habrás ganado a tu madre y a cualquiera. ¡Yo
quiero una, ya quiero una!
Y
aquí tenemos a la pastelona mayor... Paula. Un poco de azuquitar por
aquí, un poco de caramelo por allá. No nos hacemos responsables
de lo que pueda pasar, pero la dulzura abunda en esta cocina. Son de esos
postres que tu madre no te dejaba comer, esos de los que si los comías
se te caerían los dientes. Yo comí manzanas y se me cayeron
igual. Son postres muy recomendables para todo joven en época de depresión
pre-éxamenes.¡Todos a por la dentadura postiza!
Cuando
veías a una chica con perejil en la oreja no penseis que es la novia
de Paco Porras, ¡no! Porque es Carla, la vegetariana de este nuestro
puchero de mamá. Ella controla el huerto, por eso algunos en el barrio
también la llaman la hierbas. Nadie sabe lo que planta exactamente,
pero cuando le pone un poquito de sal y lo mete al horno está pa' chuparse
los dedos. La cocina vegetariana es lo suyo, es sana como una manzana y compartirá
con vosotros todo su conocimiento sobre lo más verde que puedes poner
en tu mesa: lechugas, espinacas, acelgas, guisantes…y un sin fin de
verduritas más.
