CRACK

La impureza de la pasta, “lavada” o no, hace que no sea administrable por vía de inyección, y que abrase el conducto nasal, limitando su uso a pipas especiales vidrio, o a aspirarla calentándola sobre papel de plata.

    Sus efectos son anestesia en el paladar y la garganta, seguida por una estimulación parecida a las dosis altas   de cocaína, aunque más breve (diez o quince minutos).

    Esa brevedad provoca que el usuario se prepare nuevas pipas (o “chinos”).

    Su valor eufórico es superior al de la cocaína.