VISITAS A LOS MONUMENTOS




HUMILLADERO



Es una construcción aislada situada al pie de la carretera que une los núcleos de Alcalá de la Selva y Virgen de la Vega. Tiene planta cuadrada, formada por cuatro arcos de medio punto en cada uno de sus lados, que sostienen una cúpula vaída decorada con esgrafiado sobre pechinas trapeciales con restos de pintura. En el interior de cada esquina formada por los arcos hay una hornacina de concha, y la clave de los arcos está decorada con una cabeza de angel. La construcción es toda de sillería con cubierta a cuatro aguas, y fue realizada por un hijo del lugar, Miguel Palomar, en 1.628.



ERMITAS DE SAN ROQUE Y NUESTRA SEÑORA DEL LORETO



La ermita de Loreto es una construcción gótico-renacentista del siglo XVII, de mampostería y cantería, unida por la cabecera con la de San Roque. Una de las ermitas presenta bóveda de crucería estrellada de ladrillo y posee una pequeña nave cuadrada; la otra cuenta con una bóveda de medio cañón con lunetos. No parecen ser coetáneas: la de crucería consta que fue realizada por el sacerdote Melchor Corella en 1.629, aunque no se conoce al maestro. Ambas portadas son adinteladas, cubiertas con entramado de madera sobre zapatas decoradas que apoyan en columnas dóricas.



IGLESIA PARROQUIAL DE SAN SIMÓN Y SAN JUDAS: ENTRE EL MISTERIO Y LA LEYENDA



Obra gótico-renancestista, construida a finales del siglo XVI e inaugurada en 1.614, es un templo de grandes dimensiones de mampostería y cantería en sus elementos principales y en hiladas junto a los contrafuertes. Presenta tres naves de sillería y plementería encalada -de mayor altura la central- cubiertas de crucería estrellada. En el exterior existen contrafuertes rematados por pirámides, con arcos de medio punto entre ellos. La entrada se produce por el lado de la epístola, con tres arcos: el central, que presenta mayor altura, de medio punto y moldurado entre pilastras, y los laterales de menor altura y rebajados (el arco de la izquierda se derribó para permitir el paso de vehículos). La portada, situada en el arco central bajo monumental arco acasetonado, es el elemento arquitectónico más interesante. Fechado en 1.596, es obra de estructura manierista con tres cuerpos: el primero presenta un arco de medio punto enmarcado por pares de columnas dobles, exentos que sostienen un entablamento con dos frontones simétricos. Sobre él se dispone el segundo cuerpo con cinco calles que albergan hornacinas de concha. Bajo la central se encuentra el escudo del Señor de la Villa, el Conde de Fuentes. El tercer cuerpo presenta una única hornacina rematada con escultura de Dios Padre entre volutas. La Torre se encuentra a los pies, en el lado del evangelio, y consta de tres cuerpos de cantería, con los dos superiores en forma octogonal. El presbiterio da paso a la Capilla del Sagrario, situada detrás del altar, con cúpula sobre pechinas y pinturas sencillas del siglo XVI en mal estado de conservación.



SANTUARIO DE LA VIRGEN DE LA VEGA



Obra barroca del siglo XVIII, es un gran templo de mampostería y cantería, con tres naves armadas por arcos fajones que apoyan en pilares cuadrados, y cubiertas con bóvedas de medio cañón con lunetos en la central y de arista en las laterales; el crucero se cubre con cúpula sobre pechinas. Fue construida por el maestro Juan Escuder en 1.751, siguiendo el diseño del padre carmelita Fr. Bernardo de la Purificación. La fachada en el hastial de los pies presenta una gran unidad, con la calle central en recesión. Es de perfil mixtilíneo y cornisa con moldura en cuyo eje hay una espaldaña de un solo hueco. Las pilastras del segundo cuerpo se tuercen como si fueran columnas de Andrea del Pozzo. Hay que destacar las pinturas murales de las bóvedas, ejecutadas por el pintor turolense Ignacio Zaera de 1.825 a 1.828, con los temas de la Anunciación, la Virgen de la Vega, la Inmaculada, el Nacimiento y una escena mariana, y en el sotocorro, la Asunción de la Virgen, y en las pechinas, las figuras de Judit, Jael, Esther y Ruth. El primitivo altar mayor fue destruido en 1.936 y había sido realizado en 1.771 por el escultor Juan Gascón, habiéndolo dorado José Villanueva. Imágenes modernas del Sagrado Corazón, Almas del Purgatorio, Santiago y San Francisco. La imagen de la titular fue oculta bajo tierra en 1.936, pero la restauración le ha hecho perder su valor antiguo.



EL CASTILLO



Se encuentra ubicado en lo alto del Cerro Norte, en la confluencia del valle del río Alcalá y un pequeño valle lateral del Barranco de Valdepino. Durante las guerras civiles del siglo pasado sufrió mucho: ampliado y reconstruido en 1.839 por las tropas carlistas, en 1.840 fue sitiado por OïDonell, quedando de nuevo seriamente dañado, aunque aún subsisten en pie vastos lienzos dominando el núcleo principal. De origen probablemente árabe, la Torre del Homenaje, residencia anterior de los Heredias, tiene planta de trapecio rectángulo en forma de quilla con lados rectos de dimensiones 37 por 15 metros. Esta planta, muy poco frecuente en los emplazamientos sobre roca, delata su anterior carácter de residencia nobiliaria. En el flanco oeste del castillo tiene un patio rectangular con construcciones adosadas al sur. El Castillo presenta grandes muros de mampostería, a base de piedras menudas reforzadas en las aristas por sillares, todo ello conservado hasta el segundo nivel de estancias, aunque inicialmente tuviera tres niveles. Se conservan algunas ventanas y dos portillos, pudiendo advertirse tres huecos semicirculares, restos de lo que debió ser una galería hacia el sur. En la planta baja hay tres espacios de los que el central presenta bóveda de cañón apuntado de sillería, y el lateral sur es un ámbito que se cubre en parte por una bóveda de horno. El estado de conservación es ruinoso, por lo que sería necesaria una actuación inmediata para su recuperación como elemento histórico- artístico y monumental.