La educación
La família
La religión
La clase social
Este tema aparece en el primer capítulo, se
presenta como una institución totalmente inútil sobretodo
para el desarrollo personal y dominada por las convenciones, la disciplina
y la uniformidad.
Es un mundo totalmente cerrado y aislado de la realidad
exterior aunque siga sus mismas normas. Esto también es un tema
clásico de Forster " la crítica del sistema educativo británico
". Hablamos de un mundo masculino, normas rígidas donde se permitan
las relaciones homosexuales siempre que no se hicieran públicas.
En el primer capítulo, el profesor le pregunta
sobre su família y sabemos que su padre ha muerto y se crió
con su madre y sus dos hermanas ( igual que Forster ). Esa orfandad paterna
es una característica común de la novela de Forster. En esta
novela, la figura paterna si tiene importancia porque se lo proponen como
un modelo a imitar, y lo mismo le pasa a Clive. El Dr. Barry, en
muchos casos funciona como padre de família, tanto que Maurice cuando
lo necesita acude a él pero el doctor no encuentra solución
alguna al problema y Maurice se da cuenta que nadie en su entorno va a
poder ayudarle, Maurice ya ha reconocido su identidad.
La presencia de las mujeres es muy importante,
el tratamiento de las mujeres en esta obra es una excepción, porque
Forster solía comparar la mujer con la problemática homosexual
porque en ambos veía similitudes de represión sexual, victimización
a causa de las normas sociales y por la marginalidad. Aquí en la
novela es lo contrario son investigadoras, defensoras radicales de las
convenciones sociales y están tratadas con una hostilidad directa.
Al principio, Maurice respeta a su madre y hermanas porque son ellas las
que le dan lo que necesita pero después la misogínia
es clara.
Se desvela pronto como un elemento aliado de la família
y la educación para mantener un equilibrio social. Maurice intenta
adaptarse a ese orden establecido pero esa estructura se revela contra
él.
Forster se opone a la institución en sí, a las iglesias
establecidas y a la religión instituzionalizada, pero no deja de
sorprenderse por el poder del ritual.