Aqui estamos, papeándonos junto a una manada de yankies la tan típica y sabrosa cheeseburguer... y es que nada sabe igual cuando te lo comes mirando a Wall Street.
Lo realmente sorprendente fue cuando nos dejaron entrar en Tiffany's.... ay, con la pinta de "kinkis" que llevabamos.... nos dejarian pasar, pero por lástima.
	Bonita tarde aquella del domingo, dia internacional del reagee donde los haya. No todo el mundo puede "fardar" de haber estado en un concierto en el Central Park... aunque la entrada fuera "free".
Y mañana de compras en Chinatown, que se parecia más a un mercadillo de souvenirs turísticos para europeos en el centro de Taiwan... Pero de todas formas recordaremos el precioso reloj que alli encontró Pepe... hay cosas que son para toda la vida.