Entrevista amb Vannebar Bush

Entrevista amb Vannevar Bush

per Mariola Tàrrega Moltó


Vannebar Bush, fou un d'aquells estudiants atípics amb pocs diners, molta sort i una intel·ligència extraordinària. Les matemàtiques foren l'eix central de la seva vida, una passió que el va dur a inventar una de les primeres màquines capaces de resoldre equacions mitjançant un sistema de targetes perforades.La seva perseverància i anys d'experiència en empreses, com General Electric (d'on fou acomiadat),en docència universitària i en col·laboració amb els governs dels EUA, durant la Primera Guerra Mundial, el van portar a idear el MEMEX. Tal volta,sorprenga al lector, però estem davant d'un aparell que va a canviar la nostra relació amb els llibres, per a sempre.

M.T.M:

Quina ha estat la seva principal motivació a l'hora d'idear un aparell d'aquestes característiques?

V.B.:

Hay un tipo de catástrofe que continúa repitiéndose en nuestros días y entre nosotros: logros verdaderamente significativos se pierden entre el maremágnum de lo carente de interés. las publicaciones han sobrepasado los límites de nuestra capacidad actual de hacer uso de la información que contienen.Sin ir más lejos, las leyes de la genética que Mendel formulara se perdieron durante toda una generación debido a que no llegaron a oídas de aquellos científicos capaces de llegar a comprenderlas y difundirlas

M.T.M:

Creu vosté que la ciéncia i la societat, en general, estan preparades per a rebre un canvi així, com el que suposa el seu invent?

V.B.:

El mundo ha entrado en una era de dispositivos complejos pero altamente fiables y económicos al mismo tiempo. Y de ello se ha de derivar, necesariamente, alguna consecuencia. La ciencia ha proporcionado, siempre al ser humano formas veloces de comunicación entre personas individuales, le ha permitido el almacenamiento de las ideas y le ha otorgado la posibilidad de manipular este archivo y extraer de él ideas, de modo que el conocimiento evolucione y perdure a lo largo de toda la existencia del género humano, y no sólo de la vida de sus componentes individuales

M.T.M:

Quins avanços ens poden arribar a donar les seves idees?

V.B.:

Así, el científico del futuro se movería libremente por su laboratorio o por el campo objeto de su estudio y, cada vez que se tropezase con algo interesante de registrar, podría pulsar el disparador de su minicámara para fotografiarlo con un apenas audible “click”. ¿Suena a fantasía? Pues lo único de fantástico que en todo ello hay es la idea de poder tomar tantas fotografías como pudiera resultar útil

M.T.M:

Però,vertaderament, tenim una tecnologia capaç de fer funcionar el Memex?

V.B.:

Disponemos de infinidad de ayudas de tipo mecánico por medio de las cuales podemos llevar a cabo una transformación en los medios de científicos de archivo.Existen signos de un cambio en esta situación, un cambio posibilitado por los potentes instrumentos que estamos comenzando a utilizar: células fotoeléctricas capaces de ver los objetos en un sentido físico, fotografia avanzada que puede registrar lo que se ve e incluso lo que no se ve.Existen desde hace ya algún tiempo pel´ıculas fotográficas que, impregnadas con una emulsión diazoica, no necesitan ser sometidas al proceso del revelado, por lo que la imagen es ya visible instantes después de haber sido operado el disparador de la cámara.

M.T.M:

Exactament, com es podrà aplicar tota aquesta tecnologia,que ens descriu,al Memex?

V.B.:

Existe esquema de confección de registros se utiliza en la actualidad para la transmisión de facsímiles. El puntero dibuja sobre la superficie del papel una serie de líneas con pequeños espacios entre una y otra. A medida que se mueve, el potencial eléctrico del puntero va variando en concordancia con las variaciones de la corriente que, a través de los cables telefónicos, va recibiendo del emisor que, a su vez, ha ido convirtiendo en impulsos eléctricos las lecturas de una c´elula fotoel´ectrica dedicada a explorar el documento original. En cada instante del proceso, la oscuridad de la línea dibujada en el papel del aparato receptor es idéntica a la del punto de la imagen que la célula fotoeléctrica está leyendo en el documento del emisor. Por tanto, cuando el documento original se haya explorado en toda su extensión, se habrá creado en un lugar remoto una copia idéntica a él.Si se utilizase una película fotográfica tratada en lugar de una pantalla brillante y se permitiese al aparato que he descrito más arriba transmitir una imagen aislada en lugar de una sucesión de imágenes, obtendríamos como resultado una cámara rápida para fotografía en seco.Al igual que la fotografía seca, la microfotografía aún tiene un largo camino que recorrer. El esquema básico de reducir el tamaño de un archivo, para examinarlo posteriormente mediante proyección en lugar de a simple vista, contiene posibilidades demasiado amplias como para ser ignoradas.


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