CUERPO-MÁQUINA



                                                        
 
 

        La historia de la vida siempre se ha fundamentado en una dualidad: Donde hay un Dios tiene que
        haber un demonio; donde hay un Bien tiene que haber un Mal; donde hay lo Vivo tiene que haber
        lo Muerto... Siempre una especie de contrariedad y antonimia moralizante y definidora.

        Una de las dualidades más importantes dentro de la filosofía siempre ha sido la diferencia entre el
        cuerpo y el alma. Algo que sirva para explicar lo sensible, de lo inteligible y sobre todo, la Vida y
        el más allá. Todos los filósofos importantes lo han planetado. Uno de ellos, por ejemplo, Platón, el
        cual planteaba una vida más allá de la muerte; algo que cuando el cuerpo o la materia dejaban de
        tener vida terrenal, permaneciera existiendo. Ese algo podría ser el alma. Para Platón, el alma está
        antes y después de la vida. Es algo entregado al cuerpo y encadenado a él, pero, sin embrago, es la
        única conexión que nos une al mundo extra-materia, a lo inteligible, a lo infinito, a lo perfecto a las
        Ideas. El alma es superior al cuerpo, pero aún así depende de él y el alma será la que nos ayude a
        nosotros a estar más cerca del Bien

        Esa misma dualidad se plantea en la obra, solo que está vez el alma es sustituidad por La Máquina.
        La máquina es la que nos ayudará a conseguir esa perfección, la que nos dará Todo lo que deseemos.
        Algo que nos proporcionará la inmortalidad y el placer que necesitemos; nos convertirá en dioses y
        nos ayudará a alcanzar la verdad. Nos liberará del cuerpo mortal, pero, aún así, como el alma. La ma-
        quina necesita al cuerpo y sobre todo... a la mente. Siempre se dice que la mente es el arma más pode-
        rosa y que siempre es superior a la máquina, y, en el fondo, es verdad. La máquina necesita al cerebro,
        pero solo por una razón: quiere destruirlo. Los dos se quieren destrir mutuamente y no son independien-
        tes, son complementarios. El ser humano siempre ha necesitado herramientas para poder subsistir ya
        que el cuerpo no le es suficiente y es el cerebro el que le permite usar la máquina, pero cuando a ésta
        se le da un cerebro( Inteligencia Artificial ), intenta destruir al cerebro ya que no quiere tener rivales
        y así conseguir convertirse en la Inteligencia Mayor.

        The Children of Cyberos intentan eso: convertirse en algo superior, crear una nueva filosofía; una nue-
        va Religión. Todas las criaturas quedan absorvidas y convertidas en máquinas. Hay dos opciones: o te
        coviertes a ellos, o mueres. Pero no hay que olvidar una cosa: éstos fueron creados por humanos y, por
        lo tanto, tienen todas sus características. La mayoría de ellas malas. Una combinación de deseo voraz
        por conseguir todo lo que quieren y un ansia de destrucción, aniquilacion y asimilación para tener todo
        el poder. Saben que el ser humano es su principàl enémigo; el único que les puede destruir. Y ellos no
        quieren eso. Cierto es que alguna vez fueron seres humanos, pero ahora son "entes inmateriales" que
        han sido capaces de superar todas los inconvenientes que el ser humano tenía y eso les hace superiores,
        los hace mejores, los hace Dioses.