MUERTE
La muerte es uno de los temas principales tratados en la obra. En la obra
se trata sobre todo del miedo a
morir. La muerte es lo
que más respeto nos impone y quizá lo que más miedo
nos da. Todos tenemos, en
teoría, que morir
algún día, pero ,aún así, nos resignamos a
encontrarnos con ella. La muerte nos pisa los
talones cada día
y más tarde o más temprano nos alcanza.
El ser humano, desde sus
origenes, ha tratado de darle una explicación a la muerte... sobre
todo mediante
la Religión. Siempre se ha querido buscar algo después
de la muerte: "La muerte solo es el principio", "La
muerte es la liberacion"..
muchas frases usadas por todas las religiones para al final acabar concluyendo
que
la muerte no es tan mala
y que solo es el comienzo de una nueva vida. En el fondo la muerte tiene
un cáliz
moralizador y educativo:
si haces las cosas de la manera que determina tu cultura, serás
recompensado en la
otra vida. Digamos que
la muerte es un juicio sobre nuestra actuación vital en la cual,
si hemos hecho el bien,
seremos recompensados.
La "secta" en la que se
involucra el protagonista: "The Children of Cyberos" trata de buscar un
remedio a
la muerte. Algo que nos
haga escapar de ella. Según estos "Niños": el miedo a la
muerte y el Sexo son las
dos grandes preocupaciones
del ser humano. Siempre hemos intentado superar sus limitaciones y parece
ser
que ellos han sido capaces
de crear al ser perfecto. Un ser cybernético capaz de disfrutar
su sexualidad al
máximo e inmortal.
Aunque para ello ha de renunciar a su forma humana en todos sus aspectos.
Se convier-
ten en electricidad y energía
y éstas nunca mueren.; solo se transforman.
La muerte, por otra parte,
tiene el inconveniente de que es desconocida. Nadie que haya traspasado
ese um-
bral ha podido contarlo
(sin contar las historias de fantasmas y espíritus), por lo que
causa pavor. ¿Existirá
algo después? ¿Merece
la pena vivir siendo bueno para luego tener un post-mortem placentero?
Respues-
tas que de una manera u
otra dan las religiones basándose en historias transmitidas de generación
en gene-
ración. Aún
así, por mucho que las religiones traten de resolver esas dudas,
sigue existiendo el miedo a mo-
rir.