OBSESIÓN BIOLÓGICA:

    Swift trasluce en Los viajes una obsesión biológica : el término excremento- así como otros relacionados con las necesidades corporales- aparece una veintena de veces en el texto. Cuando Gulliver, recién llegado a Lilliput, siente necesidad de orinar, Swift describe la escena con pormenorizada minuciosidad: "lo que hice abundantemente... y la muchedumbre se hizo a ambos lados para esquivar el torrente que fluía de mí con tanta violencia". Aquí, evidentemente, el incidente recalca la magnitud de Gulliver frente al microcosmos de Lilliput. Más adelante, por razones políticas, apaga el fuego de palacio con su propia orina. El lugar queda mancillado. Y por razones obvias. ¿ Podríamos imaginarnos a un par de gigantes de Brodbingnag extinguiendo el Gran Incendio de Londres- o un hipotético fuego de Buckingham Palace- con el mismo método y las secuelas de tal acción ? En la Real Academia de Lagado (parte tercera) se intenta transformar los conspiradores antigubernamentales se descubren mediante el análisis de sus deposiciones.

    En la parte cuarta los yahoos, esas horribles criaturas, están bañadas, por así decirlo, en sus propios y asquerosos excrementos .Por otra parte  - y en contraste - los de los houyhnms, son compactos, limpios e inodoros. Algunos críticos han pretendido ver en todos estos ejemplos una muestra de la decrepitud mental de Swift. Posiblemente, aunque resulta también aplaudible considerarlo todo como una alegoría: el excremento de los yahoos - y el de los humanos- es repelente, como su propia y viciada  naturaleza ; el de los houyhnhnms, agradable como ellos,
 
 

    Se pueden igualmente detectar en "Los viajes de Gulliver ", especialmente en los pasajes relacionados con el sexo, vestigios de la vida sentimental del propio Swift, causa de las diversas y contradictorias posiciones existentes en vidad sexual desde diversos ángulos, Entre los lilliputienses, la cópula es un mero producto de la concupiscencia: el amor es Unicamente atracción física y sexual; los hijos son mero producto de la debilidad carnal. Por este motivo los padres tienen muy pocos derecho sobre ellos, En la parte segunda la visión de los pechos desnudos de las doncellas de Brodbingnag llena a Gulliver de horror, no tanto por su gigantesca magnitud sino por ser lo que son. En la parte tercera, la única actividad sexual es prácticamente la extramatrimonial ("...las esposas escogen sus amantes entre los forasteros... y actúan impunemente ante las propias narices del marido.."). La infidelidad matrimonial se ha convertido en práctica generalizada que se debe achacar tanto al incumplimiento del débito conyugal por parte del absorto marido como a la incontinencia y frivolidad femeninas. Según sus biógrafos, Swift, ante el rechazo de su único y gran amor, Varina, nnca mantuvo relaciones sexuales con su esposa, aunque sí con otras mujeres; sin entrar a discutir la comprobación de tal hecho, ahí está. En cierto modo, también existe un paralelismo entre esa infidelidad conyugal femenina de la Isla Voladora y la primera esposa de H. Walpole, Catherine Shorter.
 
 
 
 
 
 
 

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© Patricia Canet Liñana
   Academic year 2000/200
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