Reflexión sobre la asignatura

por Paula Sánchez Feliu

Debería empezar diciendo que el hipertexto era, hasta hace tres meses (¿tres? Puede que cuatro) un perfecto desconocido para mí. No quiero decir con esto que yo no utilizara internet. De hecho, soy una usuaria asídua de la World Wide Web y desde que tenía 12 años he participado activamente en foros, comunidades, blogs, chats y he mantenido muchas y variadas relaciones de amistad con mucha gente a través de la pantalla. A los 12 años ya había aprendido a bajarme juegos pirateados y a buscar información por la red. A los 14 aprendí a participar en páginas web publicando historias y a comunicarme con otros ususarios mediante mensajes. A los 15 descubrí los foros y a los 16 empecé a escribir en mi propio blog. Incluso hubo un tiempo en el que estuve haciéndome una página web (aunque lo dejé pronto porque me cansé pronto del blog y no llegué ni a estrenar mi propio diseño). Por otra parte, gracias a msn messenger, skype, gmail y otros tantos, he estrechado mis amistades por internet y, como ya comenté en el foro, he conocido maravillosas personas gracias a este medio. Así que no se puede decir que para mí el html y este mundillo, en general, fueran desconocidos. Lo que me era desconocido era el hipertexto.
Puede sonar contradictorio pero es la pura verdad. Jamás había oído hablar de una cosa llamada hipertexto hasta que leí el título de la asignatura. "Eso tiene que ver con internet", me dijo alguien, "con los enlaces y todo eso". No entendí a qué se refería. Y una vez empezadas las clases me costó mucho entender de qué iba todo el asunto. Lo que me estaban diciendo, a grandes rasgos, era que la estructura de internet tiene un nombre y un origen. Que fue inventada, al fin y al cabo, y que hubo un tiempo en que era algo totalmente misterioso, un campo apenas explorado. Que la famosa www no es sino una manera de presentar esa estructura al público, una de las muchas que podrían haberse impuesto. Y que esa estructura madre y esencia de internet es el hipertexto.
Nunca me lo habían enseñado y nunca había leído sobre ello. Lo que es más, yo tenía 9 o 10 años cuando Internet se evidenció como algo útil y accesible al público, lo que quiere decir que nunca había tenido la posiilidad de plantearme que la existencia de algo así no fuera algo obvio, sino el resultado de muchas ideas y muchas mentes puestas a trabajar en común. El resultado de toda una nueva reinterpretación de la literatura, de la escritura y la lectura. En otras palabras, yo no veía la estructura de enlaces y la lectura no lineal como algo nuevo y sorprendente: estaba acostumbrada a ella. Como dice Espen Aarseth en el texto la literatura ergódica, los juegos de aventuras gráficas son un precursor claro de Internet, con su estructura no lineal y la posibilidad de elegir siempre entre diversos caminos para seguir la historia. Yo había jugado a a tantos juegos de aventuras gráficas antes de enfrentarme a Internet (juegos que por otra parte me fascinaban) que la lectura no lineal estaba tan integrada en mi conocimiento como la lineal. Internet sólo fue un paso más hacia otro mundo hipertextual más grande e ilimitado, sin las fronteras impuestas por el CD-ROM. Cuando eres tan pequeña las cosas que van apareciendo en tu vida te parecen algo natural y evidente, y no hace falta darles más explicación. Como nunca me había parado a pensar sobre el asunto, y nadie me había hecho pensarlo, nunca tuve la posibilidad de descubrir los orígenes de Internet y de su peculiar modo de lenguaje, como tampoco te planteas cómo se inventó la escritura hasta que has crecido y te paras a pensar sobre ello.
Por tanto el hipertexto era un gran desconocido. Y por tanto, aprender sobre él ha sido una sorpresa. Se podría decir que ahora le he dado a mi conocimiento (muy general por otra parte) una base, unos antecedentes e incluso un por qué. Lo que antes era algo natural ahora se me presenta como el resultado de una evolución. Y lo mismo me ha ocurrido con términos como web 1.0. y web 2.0. Yo he vivido el paso silencioso de una a otra, pero no se me había ocurrido pensar que ese paso suponía todo un cambio de planteamiento en las funciones y posibilidades de Internet. Una vez más, lo natural y evidente se me ha presentado como un problema complejo con un origen y un fin, y ahora espero la llegada de la web semántica (ó 3.0.) con mucha curiosidad.
En cuanto a la parte práctica de la asignatura me ha sido de mucha utilidad. Me ha permitdo recordar los fundamentos del html y comprender mejor todo el asunto de almacenaje de ficheros y vinculación. Por otra parte, conocer las herramientas que están a nuestra disposición gracias a la UV es interesante y útil sin duda, y espero poder seguir usándolas de ahora en adelante aunque no me sea imprescindible (estoy segura de que casi nadie sabe de su existencia y menos como se usan... los profesores prefieren mantener su docencia clásica y no complicarse más. Es una pena).
Así que sí, puedo decir que esta asignatura me ha hecho aprender y pensar y puedo decirlo sinceramente. Igual que puedo decir que yo siempre he sabido mucho sobre Internet sin saber absolutamente nada. El conocimiento humano es así.