Mar del Plata es una importante ciudad puerto y balneario
argentino ubicada en el litoral del mar Argentino,
en el sureste de la provincia de Buenos Aires.
Es la cabecera del partido de General Pueyrredón y la ciudad
turística más importante de la Argentina,
contando con la infraestructura hotelera más amplia del país.
Está ubicada 404 km al sureste de la Ciudad de Buenos Aires.
Para 1879 se crea el Partido de General Pueyrredón,
dividiéndose en dos el Partido de General Balcarce.
El 19 de Julio de 1907 la legislatura aprueba el proyecto que
nombrara a Mar del Plata, ciudad.
En 1886 el ferrocarril fue extendido hasta Mar del Plata por
gestiones del gobernador Dardo Rocha.
El poblado se convirtió así en el balneario preferido de la
clase alta de Buenos Aires.
Al año siguiente fue construido el Bristol Hotel, inaugurado el
8 de enero de 1888.
Ese mismo año la Municipalidad aprobó un Reglamento de baños
que establecía, entre otras normas,
que estaba prohibido bañarse desnudo, que el traje de baño
admitido era todo aquel que cubra el cuerpo desde el cuello hasta la
rodilla,
se prohíbe a los hombres solos aproximarse durante el baño a
las señoras que estuvieren en el agua,
debiendo mantenerse por lo menos a una distancia de 30 metros,
asi como también se prohíbe a las horas del baño el uso de anteojos de
teatro u otro instrumento de larga vista,
así como situarse en la orilla cuando se bañan señoras.
En 1904 el empresario Ernesto Tornquist construyó el Torreón,
ampliando los límites del balneario.
Allí se instaló una confitería y un club de tiro a la paloma.
En 1909 se inauguró la explanada de la loma del Torreón.
En 1914 se inauguró la Rambla, un paseo de material en la Playa
Bristol. En 1915 se inició la costumbre,
sobre todo femenina de "tomar sol": «las muchachas
parecen 'fritas'», se decía por entonces,
y en 1918 comenzaron a cambiar los trajes de baño femeninos,
descubriendo los brazos.
En 1919 se realizaron las primeras elecciones libres, en las
que triunfó el Partido Socialista,
iniciando un largo ciclo de presencia hasta la década del '70.
La gestión socialista produciría un giro estratégico a la ciudad,
orientándola a ser receptora del turismo de masas,
protagonizado por las clases medias y trabajadores,
a partir de las nuevas leyes laborales que, entre otras cosas
establecían las vacaciones pagas.
En 1924 se inauguró el puerto de Mar del Plata, que desarrolló
un importante flota pesquera, principalmente por una comunidad de
inmigrantes italianos.
En esa misma década se completó la construcción del puerto de
ultramar, que pronto se convertiría en el principal centro de la
industria de la pesca en Argentina.
En 1938 finalizó la construcción de la Ruta Nacional 2
conectando Mar del Plata con Buenos Aires.
La difusión de la sindicalización y los derechos laborales en
la década del '40 permitió que las clases trabajadoras comenzaran a
elegir a «La Feliz» para pasar sus vacaciones,
fenómeno facilitado por el aguinaldo (decimotercera paga
recibida a fin de año) y el turismo social.
Los sindicatos adquirieron más de treinta hoteles, entre ellos
el Hotel Hurlingham, uno de los más elegantes de la ciudad.
En las décadas del '50 y del '60 las clases medias se volcaron
masivamente a poseer un departamento en Mar del Plata,
que generó un boom de la construcción y un cambio notable de su
estructura, que dejó de ser la "villa balnearia" para convertirse en
una ciudad permanente.
Actualmente la ciudad es uno de los principales centros
turísticos del país, y recibe durante cada temporada veraniega entre
aproximadamente dos y tres millones de visitantes,
produciendo de esta forma un salto en el número de habitantes,
que se ha elevado en casos extremos hasta multiplicar dos veces la
población estable.
A fin de recibir semejante oleada de visitantes, posee una
completa infraestructura turística. Además de la oferta de verano,
la llamada Perla del Atlántico o la "Biarritz argentina" -por
la marcada similitud con esa ciudad francesa-
cuenta con una variada oferta de temporada baja: turismo
deportivo, ecológico, aventura, pesca y eventos culturales
son sólo algunas de las alternativas que esta ciudad ofrece a
sus visitantes como también un interesante patrimonio histórico y
natural.
|
Catedral de los Santos
Pedro y Cecilia
|