El amplio sinclinal alpujarreño que se extiende desde Orgiva a los márgenes del Andarax, en la provincia de Almería, está recorrido por tres ríos principales, que vierten sus aguas en el Mediterráneo, Guadalfeo, llamado también Río Grande de Orgiva, Río Almería o de Andarax, y el Río Adra.
El río Guadalfeo discurre de Este a Oeste, formándose con los caudales procedentes de los ríos Poqueira y Trevélez y posteriormente con las aguas del río Cádiar. Atraviesa la parte meridional del valle de Orgiva y desemboca en el Mediterráneo, entre Salobreña y Motril. Constituye la arteria fluvial más importante de La Alpujarra, de curso constante y vadeable en todas estaciones, menos en sus grandes avenidas.
El tramo oriental de la depresión alpujarreña está atravesada por el río de Almería o de Andarax, que discurre de poniente a levante, actuando de colector de las escasas aguas procedentes de la vertiente más oriental de Sierra Nevada, aportadas por los ríos Horcajo, Nevas y Chico, así como por otras corrientes y desciende de la cercana y minera Sierra de Gador, la más rica en galena de toda La Alpujarra.
Nace en la cara sur del Cerro del Almirez, por encima de Lanjarón, desemboca junto a la histórica ciudad de Almería, en pleno litoral mediterráneo.
El río de Adra, el segundo en importancia dentro de La Alpujarra, no se puede comparar con el Guadalfeo ni en longitud ni en aportación hídrica. El contorno de su cuenca se halla comprendido entre la Sierra de La Contraviesa, al oeste, Sierra Nevada al suroeste y cerrado al sur por el Mediterráneo.
Forma su cabecera los ríos de Mecina Bombarón, Válor, Nechite, Laroles y Alcolea. Desemboca en las proximidades de Adra.
En función de las características físicas y estructurales de La Alpujarra, hay que afirmar respecto a su clima que se da en ella los contrastes propios de un escalamiento térmico claramente diferenciado, que abarca desde la tempertaura casi tropical de las ramblas de Albuñol y Gualchos hasta los rigores del círculo polar que se da en el Mulhacén y el Veleta.
Las características que definen el relieve alpujarreño, formado a partir del gran macizo de Sierra Nevada, con cuencas hidrográficas dispuestas sobre vertientes y planos contiguos, favorecen que los núcleos de población se acomoden, en su distribución y emplazamiento, a los cauces impuestos por la geografía.
Para su mejor conocimiento y ubicación la vamos a dividir en dos partes:
1. La Alpujarra Granadina,
o La Alpujarra Alta Oriental. Quizá sea esta subcomarca la más desconocida, se halla situada entre el río Grande de Cádiar y el valle de Laroles, abarcando una extensión superficial de 425 Km.2 aproximadamente y sus pobladores descienden, probablemente, de los 300 repobladores castellanos, leoneses, asturianos, gallegos y andaluces que ocuparon a partir de 1572, los poblados, villas y lugares de la Tahá de Uxixar de Albacete, cabeza de jurisdicción de Las Alpujarras durante los siglos XIV a XVIII.
o La Alpujarra Alta Occidental. Se encuentra entre el margen derecho del Guadalfeo y el territorio del Valle de Lecrín. Está constituida básicamente por las antiguas Tahás moriscas de Orgiva, Poqueira y Ferreira, protegidas por un conjunto de cumbres eminentes, las más altas de la cordillera Penibética, como son el Pico de Jéres (3.086 m.) y el Pico del Caballo (3.015 m.), a las que se agregan el Pico del Veleta (3.392 m.) y el Mulhacén (3482 m.), los dos colosos indiscutibles de la orografía peninsular. Dentro de su accidentado territorio, que se caracteriza por la altitud y pediente de sus montañas y por su indiscutible proximidad a la región de las nieves perpetuas, se encuentran los hermosos valles de Trevélez, Poqueira, Chico y Lanjarón, cuajados de precipicios, oquedades y malezas; y al pie del Cerro de las Minas, junto a Cáñar, la extensa depresión del Albacete de Orgiva, por cuya franja sur discurre, impetuoso, el río Guadalfeo o de la Sierpe, como se le llamó por los aborígenes del valle durante los siglos XIV y XV. La extensión superficial de La Alpujarra Alta Occidental, es de 475 Km.2 aproximadamente.
o La Alpujarra Baja o de la Costa. Al sur de las históriscas tahás de Orxiva y de Uxixar de Albacete, se extiende La Alpujarra Baja, una estrecha franja de terreno que va desde Rubite y Castell de Ferro hasta la Haza de la Mora y el Pozuelo, ambas del término de Albuñol. Esta vieja subcomarca alpujarreña, de 346 km.2 aproximadamente de superificie, constituye un cálido y atractivo lugar junto al Mediterráneo, protegido en su parte central, por el macizo de la Contraviesa y hacia el oeste se eleva la imponente mole de la Sierra de Lújar. El litoral alpujarreño correspondiente a la provincia de Granada tiene un recorrido lineal que puede estenderse en más de 30 Km. aproximadamente abarcando los términos municipales de Gualchos, Polopos, Rubite, Sorvilán y Albuñol. Está en contacto directo con el mar a traves de Castell de Ferro, Castillo de Baños, La Mamola, Melicena, La Rábita y El Pozuelo. La costa alpujarreña viene determinada por su carácter de ladera meridional de la Cordillera Penibética. Las Sierras de Lújar y la Contraviesa, dos grandes alineaciones paralelas al Mediterráneo, cuyas finales descienden hasta el mar, conforman un litoral acantilado, con espacios verticales, a veces rectilíneas, a veces curvas y sinuosas, en las que aparecen profundas cotas de grava o arena muy gruesa.
2. La Alpujarra Almeriense,
La Alpujarra Almeriense forma un rectángulo invertido, limitando al norte con el Marquesado del Zenete, al este con los términos de Santafé de Mondújar y Gádor; al sur con Almería y el Mediterráneo y al oeste con tierras de Ugíjar, Turón y Albuñol, pertenecientes a La Alpujarra granadina.
Su extensión superficial se aproxima a los 1.500 Km.2 El Valle del Andarax. Este singular valle abarca una extensión superficial de 836 Km.2 aproximadamente y se extiende desde los altos de Bayárcal, en las proximidades del Puerto de La Ragua hasta La Alpujarra granadina Alta Oriental, justo en la confluencia del Río Nacimiento con el Río Andarax.
Las características climáticas vienen determinadas por la aridez de la zona que lleva implícita la acusada torrencialidad de las escasas precipitaciones que se producen en la misma a lo largo del año.
Dentro de la modesta red hidrográfica existente, el río Andarax es el más importante, nace en la ladera sur del Cerro del Almirez. Hacia el oeste, y a más bajo nivel que el Andarax, discurre el río Paterna, que nace en la cara oeste del Cerro del Almirez y vierte sus aguas en el río Grande de Adra, contribuyendo a alimentar el Embalse de Benínar.
Los Campos de Berja, Dalías y El Ejido.Al sur del Valle del Andarax y al oeste de Almería se sitúan las tierras bajas de La Alpujarra almeriense, en las que actualmente se integran los términos municipales de Adra, Berja, Dalías y El Ejido, con una extesión territorial aproximada de 772 km.2
El clima de la comarca se puede considerar como templado-cálido con ausencia de temperaturas extremas. Esta zona sufre frecuentes períodos de sequía y las precipitaciones tienen, por lo cual, carácter torrencial.
El término municipal de Adra constituye una pequeña terraza marina con forma triangular. Dispone de dos albuferas, La Albufera Honda y La Albufera Grande, formadas a partir de los materiales aportados por el río Adra. Estas Albuferas se han transformado en especies naturales de extraordinaria importancia, pues son lugares de paso en las rutas migratorias de muchas aves. Las Albuferas de Adra forman parte del Catálogo Provincial de Espacios Protegidos.
Al sur de la Sierra de Gádor se sitúa el espléndido valle de Dalías, entre el Mar Mediterráneo y Sierra Nevada.
El municipio de El Ejido se sitúa en la zona suroeste de la provincia de Almería, en su amplia llanura entre la Sierra de Gádor y el Mar Mediterráneo.
El término de Berja, es de relieve fundamentalmente accidentado y montañoso, con la Sierra de Gádor como elevación más importante y aparece surcado, de norte a sur, por los ríos Grande de Adra y Chico.