Degeneraciones de la retina
Es
una degeneración amplia que abarca un área considerable de la retina y
alrededores de la mácula. Se observa en personas ancianas, particularmente del
sexo femenino. Aparece alrededor de la mácula un círculo de manchas
brillantes, de bordes dentados constituidas por acumulaciones de macrófagos
llenos de lípidos. Los vasos pasan por encima de las manchas. La mácula
presenta zonas de color blanco amarillento, pigmentación ligera, y con
frecuencia hemorragias.
Es
una afección degenerativa lenta de la retina que casi invariablemente se
desarrolla en ambos ojos. Se inicia en la infancia y con frecuencia produce
ceguera en las edades media o avanzada. La degeneración afecta primariamente a
conos y bastones, particularmente los primeros, y se inicia en una zona cercana
al ecuador del ojo, extendiéndose gradualmente tanto hacia delante como hacia
atrás. Los síntomas son característicos, el más prominente es la visión
defectuosa en el crepúsculo. Este síntoma puede existir muchos años antes que
el pigmento sea visible en la retina, y se debe a degeneración de los bastones,
que son los primeramente responsables de la visión con poca iluminación.
Conforme progresa el caso, el campo se va haciendo más pequeño, hasta que
finalmente se encuentra reducido a un área restringida alrededor del punto de
fijación. Aún cuando la visión central puede conservarse durante mucho
tiempo, tales pacientes con " visión en tubo" tienen grandes
dificultades para desplazarse, puesto que en realidad están en las mismas
condiciones que una persona que mira a lo largo de dos grandes tubos y que ve
solamente los objetos situados frente a las aperturas situadas en frente de éstos
y nada alrededor. La pérdida de la visión central generalmente no aparece
hasta los cincuenta o sesenta años.