* Salimos de Alcalá del Júcar desde el Castillo, tomando el camino empedrado que, por una fuerte pendiente, asciende hacia el depósito del agua.
* Junto al depósito del agua, abandonamos el camino para coger una senda que sale a la izquierda y que asciende por la ladera en dirección NW, hacia la aldea de Las Eras que divisamos al fondo.
* Pasamos junto a un grupo de cuevas. En nuestro ascenso por la ladera expuesta a solana, disfrutamos de una bella panorámica del valle. Andamos entre una escasa y dispersa vegetación dominada por ontina, sisallo, etc., especies indicadoras de la influencia humana en la zona.
* Nos incorporamos a un estrecho camino de firme empedrado, por el que continuamos ascendiendo de frente. A la izquierda, el camino desciende hacia una histórica fuente de piedra, con abrevadero.
* Alcanzamos Las Eras, entrando por la calle Jardín.
* Llegamos a la “Plaza de los Jardinillos”, junto a la Ermita. Continuamos por la C/. San Gregorio.
* Llegamos a “La Placeta”. Proseguimos por la derecha, en dirección Este. a través de la c/Avenida. Unos metros más adelante, pasaremos junto al Colegio Público “Profesor Tierno Galván” y la antigua escuela.
* Bifurcación. Seguimos por la derecha, incorporándonos a la C/. Eras.
* ¡Precaución!. Cruzamos la carretera comarcal 3201 de Casas Ibáñez a Alcalá del Júcar. Continuamos recto por la C/. Peñicas.
* Entre las últimas casas y corrales de la aldea, nos incorporamos al “Camino de Las Eras a Casas de Ves”, por el que continuamos de frente.
* Bifurcación. Abandonamos el camino que llevamos para continuar por el de la derecha, hacia una naves para ganado.
* Bifurcación, seguimos por la derecha. Andamos en el límite de la llanura y el valle, disfrutando de una bella panorámica de Alcalá del Júcar. Unos metros más adelante, tras pasar junto a las naves (a nuestra izquierda), el camino se convierte en senda debido a la pedregosidad del terreno. Continuamos bordeando el valle siguiendo las trazas del ganado.
* Llegamos a un mirador natural, en una curva del camino. A partir de este punto, la senda vuelve a ser camino. Bordeamos el vértice geodésico de “El Morrón” (693 m), altitud que da nombre al sendero y que queda a nuestra izquierda.
* Pasamos junto a las ruinas de un “chozo” (construcción popular de piedra), entre olivos y almendros. Seguimos llaneando por el límite de la llanura y el valle.
* Salimos al “Camino de Alcalá del Júcar a Villa de Ves”, por el que continuamos a la derecha.
* Bifurcación. Seguimos por la derecha incorporándonos al “Camino de las Casillas de Tolosa”.
* Junto a un hito o mojón de piedra con una cruz labrada, abandonamos el camino que traemos para coger un estrecho camino que sale a la derecha, frente a una gran “tiná” para el ganado.
* El firme rocoso del trazado hace que el camino se convierta en senda. En la ladera, bajo nuestros pies, se sitúa un manantial con abrevadero.
* Pasamos junto a una construcción popular de piedra, con forma de “chozo” (a la izquierda). Seguimos nuestra marcha bordeando las tierras cultivadas con olivos y almendros, disfrutando de la vistas panorámicas del serpenteante valle.
* En este punto, la senda pasa a ser camino. A la izquierda, a unos 150 m entre tierras de labor, se sitúa una casilla con muros de piedra (improvisado refugio en caso de lluvias).
* Pasamos junto a una cantera.
* Junto a la cabecera del barranco que bordeamos, salimos al “Camino de las Casillas de Tolosa”, por el que continuamos hacia la derecha. Unos metros más adelante, cruza un estrecho camino, seguimos de frente entre tierras de labor.
* Tras pasar los primeros corrales de Las Casillas de Tolosa, salen caminos a derecha e izquierda, junto a varios pozos. Seguimos recto.
* Abandonamos el “Camino de las Casillas” para coger una senda que sale a la izquierda, entre varias casillas y corrales con muros de piedra, junto a las antiguas eras. Un alto en el camino nos permitirá contemplar, desde este punto, la espectacular panorámica del valle que ha labrado el Júcar. Frente a nosotros, en dirección Sur, divisamos la aldea de La Gila.
* Tras un breve descenso en zig-zag por la senda pedregosa, pasamos junto a un antiguo pozo. ¡Precaución!, descendemos “monte a través” siguiendo las trazas del ganado por la línea de máxima pendiente, junto a una pequeña mancha de coscojas, encinas y pinos.
* Llegamos junto a un antiguo abrevadero, labrado sobre dos grandes losas de piedra. A partir de este punto, nos incorporamos al trazado original del “Camino de Carruajes”, un viario histórico de firme empedrado definido por el zigzagueante muro de piedras que desciende por la ladera.
* El camino cruza la cabecera del primer barranco.
* Pasamos junto a otro antiguo abrevadero (ya en desuso), labrado en una pequeña losa de piedra. Bajo nuestros pies, divisamos la aldea de Tolosa, junto al río Júcar.
* Una curva del camino nos lleva hasta la vaguada de un barranco de grandes dimensiones, que iremos cruzando sucesivamente siguiendo nuestro zigzagueante descenso por el camino. Andamos por la ladera de solana, cubierta con una escasa y dispersa vegetación dominada por especies nitrófilas.
* En otra curva del camino, sale una senda a la derecha que conduce hacia el depósito del agua. Continuamos nuestro descenso por el firme empedrado del camino.
* Desde otra curva del camino sale una senda a la izquierda; es un atajo que desciende hacia la aldea. Seguiremos por el camino que traemos.
* El camino nos lleva hasta las primeras casas en ruinas de Tolosa. ¡Precaución!, la acción erosiva del agua en este último tramo, junto al desprendimiento de rocas y el avance de la vegetación, han borrado el trazado del camino y dificultan notablemente nuestro recorrido. Tras este tramo, descendemos por una senda hacia el interior de la aldea.
* En este punto la senda se hace camino. Giramos a la izquierda por la calle de la Iglesia.
* Tras pasar una estrecha calle que desciende por la derecha, llegamos a un cruce de callejas. En nuestro paseo por la aldea, continuamos por la izquierda iniciando un pequeño ascenso.Frente a nosotros se sitúa el lavadero; a nuestra espalda queda la Ermita.
* Tras cruzar la vaguada del barranco, llegamos hasta las primeras viviendas del núcleo principal de Tolosa. Nos incorporamos a una calle por la que seguimos de frente, descendiendo hacia el centro de la aldea.
* Nos incorporamos a la C/. San Roque descendiendo por la izquierda. Unos metros más adelante, sale una calle a la izquierda. Continuamos hacia la derecha por la calle que traemos y que nos llevará hacia la plaza.
* Llegamos hasta la fuente situada al borde de la carretera, a la sombra de un gran platanero. Tras una parada para refrescarnos y descansar, proseguiremos el recorrido.
* Tras dejar a nuestra espalda las últimas casas del pueblo, abandonamos la carretera tomando la senda que nos sale a la izquierda entre los olivos, para tomar el puente que cruza el río Júcar, en el embalse de Tolosa. En sus márgenes crece un denso carrizal, importante refugio para las aves acuáticas.
* Al pasar el puente, continuaremos hacia la derecha por el “Camino de la Vereda de Tolosa”, incorporándonos al trazado de la Ruta del Valle del Júcar.
* Pasamos junto a unas casas en ruinas. Unos metros más adelante, pasamos junto a un muro de piedra en una antigua era, donde podemos observar una pequeña cavidad con puerta de arco (posiblemente utilizada como almacenillo).
* En este punto del camino, nos adentramos en zona de pinar.
* A nuestra izquierda observamos un “abrigo” rocoso.
* Sale un camino a la derecha. Continuamos de frente, cruzando una rambla para ir ascendiendo una pronunciada pendiente.
* Cruzamos un barranco. Andamos por una zona de umbría, entre pinar con un variado sotobosque.Desde este punto, divisamos el bello trazado sinuoso que dibuja el río, entre las abruptas y rocosas laderas del valle.
* Sale una senda a la derecha. Proseguimos de frente descendiendo ligeramente. Unos metros más adelante, sale otra senda a la derecha, continuamos recto.
* Sale un camino a la derecha que desciende hacia las pequeñas huertas de la margen del río. Continuamos de frente.
* Pasamos bajo unas cornisas rocosas (¡precaución con los posibles desprendimientos!).
* Sale un camino a la derecha, seguimos hacia la izquierda. Un poco más adelante, nos saldrán otros estrechos caminos a la derecha que descienden hacia el río. Proseguiremos hacia la izquierda. Andamos entre olivos y pinar repoblado de pino carrasco.
* Llegamos a las primeras casas del pueblo. A nuestra derecha, en el cauce del río se sitúa la Estación de aforo de la Confederación Hidrográfica del Júcar. En la margen contraria podemos observar las instalaciones del camping. Al frente, en la cima del cerro divisamos las casas de Las Eras.
* Llegamos al asfalto de la calle Olmeda. En este punto abandonamos el “Camino de la Vereda de Tolosa”.
* Finalizamos nuestro recorrido en Alcalá del Júcar, a la altura del Centro Cultural.