Comienzos III (SIC) Guerra Púnica
Anibal
y los comienzos de
Asdrúbal
el Bello fue un general cartaginés (ca. 270-221 adC), yerno de Amílcar Barca.
Acompañó a su suegro a la conquista de Iberia, y fue elegido como su sucesor
en esta labor a su muerte,. en 228 adC. Asdrúbal prosiguió la política
apaciguadora de Amílcar para granjearse la fidelidad de los pueblos de Iberia,
utilizando la fuerza sólo en contadas ocasiones
Junto a su suegro, el general
cartaginés Amílcar Barca, participó en las campañas de ocupación del sur y
el este de la península Ibérica. durante el último tercio del siglo III a. C
, en un contexto previo al estallido de
Nacido mundo en Cartago
hacia el año
Después del desastre de la primera
guerra púnica, en
El elegido para sucederle fue Asdrúbal, quien por entonces ya hacía gala de una acreditada carrera bélica y que de inmediato se decantó por la alianza con las tribus ibéricas, en detrimento del extenuante conflicto. Para consolidar dicha intención, contrajo de nuevo nupcias, esta vez con una princesa local, lo que le granjeó la amistad de muchos pueblos.
Asdrubal
llamado el Bello por sus agraciados
rasgos morfológicos, fue nombrado strategós autokrátor; es decir, caudillo de
los ejércitos establecidos en Iberia. En
La plaza estaba rodeada por excelentes yacimientos minerales, entre los que destacaban los argentíferos. Además, era una zona privilegiada para los cultivos, y su bahía marítima no tenía parangón en aquellas geografías. Desde su nueva capital, Asdrúbal administró inteligentemente los recursos disponibles, mejoró el comercio de los tradicionales salazones ibéricos, obtuvo una ingente cantidad de metal y gestionó con eficacia la industria del esparto. La riqueza comenzó a cubrir las arcas cartaginesas y se acuñaron monedas de plata con la efigie del propio Asdrúbal.
El creciente poder asustó de nuevo a
las factorías griegas establecidas en el noreste de la península Ibérica. En
226 adC, Ampurias y Sagunto, recurrieron a Roma, la cual, temerosa de esta
expansión, trató de delimitar el área de influencia púnica. Fue firmado por
los romanos El acuerdo, comúnmente denominado Tratado del Ebro,el cual limitaba
la esfera de influencia púnica al Sur del río Iberus. Con algunas cláusulas.
Por ejemplo, la de Sagunto, ciudad levantina aliada de Roma, que debía ser
respetada a ultranza. Sin duda, fue un gran acuerdo para los cartagineses,
siendo su primera victoria política tras la hecatombe de
Cartago Nova aparecía en el concierto internacional como floreciente ciudad del Mediterráneo. En la metrópoli, el auge del yerno de Amílcar se veía con recelo, algunos llegaron a denunciar que Asdrúbal se estaba desentendiendo de Cartago mientras pensaba en la creación de un reino independiente. Pero él se mantuvo fiel a su ciudad natal, fortaleciendo las relaciones con África y nutriendo a la debilitada potencia con los beneficios de su envidiable situación económica.
En
Entre
los grandes estrategas de
A la muerte de Asdrubal el ejército eligió a Aníbal como general. Sin embargo, como sucediera con Asdrúbal, en Cartago el nombramiento fue mal recibido entre los aristócratas, denominados "Los Viejos", defensores del nombramiento de Hannón el Grande, ya que consideraban que era peligroso convertir el mando del ejército en un cargo hereditario y más cuando lo ostentaban miembros de una familia demócrata, como era el caso de los Barca. A pesar de ello, el Consejo púnico confirmó el nombramiento hecho por la tropa
Aníbal Recorrió el interior de la península ibérica durante dos años alcanzando con su campaña renombre militar, la confianza de sus soldados y tesoros inmensos para Cartago, llegando de esta manera a una situación en la que sí podría enfrentarse a los romanos. Para evitar una inminente confrontación entre Roma y Cartago, Asdrúbal, yerno de Amílcar Barca y general de los ejércitos cartagineses a la muerte de éste, estableció un tratado por el cual no se podía extender la influencia cartaginesa más allá del norte del río Ebro. La alianza entre Roma y Arse, firmada posteriormente al tratado, vulneraba este tratado debido a estar la ciudad en la órbita de influencia cartaginesa. Esa es la razón por la que Aníbal atacó Arse en el año 219 adC, provocando el estallido de la contienda.
La oportunidad se presentó a las puertas de Arse, a la sazón aliada de Roma, la misma ciudad que casi veinte años antes su padre había respetado al considerar que Cartago no se encontraba aún preparada para la guerra. Enfrascada en un pleito sobre los límites territoriales con Túrbula (la actual Teruel) atacaron a territorios pertenecientes a Cartago y Aníbal, con la autorización del Consejo cartaginés, respondió a las agresiones destruyendo por completo la ciudad en el año 219 adC, tras un sitio que se prolongó durante ocho meses.
Aprovechando este hecho como excusa,
una embajada de Roma declaró la guerra contra Cartago, una guerra que estaba
planeada hacía mucho tiempo, pero que había sido postergada por el escaso
apoyo popular romano. Aníbal le confió la defensa de Iberia a su hermano Asdrúbal
y partió en la primavera del 218 adC con 100.000 infantes, 12.000 caballos y 50
elefantes a la conquista de Roma. Su ejército estaba formado por libios
(africanos) y mercenarios íberos que se habían ido uniendo al ejército
cartaginés a medida que, primero su padre, luego Asdrúbal, y finalmente el
propio Aníbal, conquistaran el territorio. De esta forma, Aníbal pretendía
desviar el golpe mortal que recaería sobre la metrópolis cartaginesa mediante
un ataque desesperado directo al corazón de
Dirigiéndose hacia el norte, llegó a vadear el Ebro, frontera con el territorio romano, sin hallar resistencia entre los pueblos que encontró a su paso. En este punto confió a Hannón 11.000 hombres para mantener las comunicaciones entre el Ebro y los Pirineos, lugar hasta el que continuó, atravesándolo y avanzando luego hasta el Ródano. A pesar de sostener algunos combates con los galos que encontró a su paso, consiguió firmar pactos con algunos de ellos, ofreciéndoles las riquezas que encontraran más allá de las montañas.
Se dirigió con su potente ejército
hacia Italia, atravesando los Alpes nevados, e inició una serie de victoriosas
campañas contra los romanos: Ticino, Trebia y Trasimeno. El Lazio estaba en sus
manos y Roma quedaba a su merced pero por una inexplicable razón no entró en
la ciudad, prefiriendo desplazarse a la zona de Cannas donde pasó el invierno
con sus tropas. El año
El asedio de Arse fue
un enfrentamiento que tuvo lugar en el 218 adC . La batalla es principalmente
recordada hoy, ya que condujo a Guerra
En la estrategia de Aníbal se pretende arriesgar muy poco, pues se trataría de una simple operación de desgaste que busca mucho más la eficacia que la brillantez. Su ataque se va a desarrollar principalmente por tres flancos de la ciudad, valle, río y el extremo occidental del alcázar (punto más vulnerable de la ciudad) en el punto más llano que mira al valle. El general ordena que sus máquinas de guerra o Vineas se arrimen contra el muro para abrir un boquete con el ariete. Sin embargo, la existencia de una torre de defensa dificulta enormemente lo que en un principio parecía una operación rápida y contundente del general cartaginés
Los ciudadanos van a emplear toda clase de armas arrojadizas impidiendo que el ariete batiera el muro. Por la noche los ciudadanos de Arse salen de la ciudad aprovechando la oscuridad para realizar incursiones en el campamento cartaginés, lo que provoca numerosas bajas entre los mismos pero Finalmente, las Víneas y Arietes consiguen derribar tres torres y parte del muro defensivo que las une, son demasiados puntos los vulnerables y los habitantes de la ciudad no pueden hacerse cargo de la defensa de todos ellos .(en imagen ciudadela de sagunto)
La narración de la gesta por parte de los historiadores romanos contribuye a magnificar la heroica defensa de la ciudad. Así, Livio señala la gran precisión y meticulosidad en la planificación de la defensa de Arse. Estos utilizan una nueva arma llamada falarica que consite en lanzar un madero de tres pies de largo coronado con puntas de hierro, con su astil forrado de estopa e impregnado de pez y azufre negro, al que se le prende fuego lanzándose sobre el enemigo el cual al ver su escudo ardiendo lo suelta quedando como un blanco fácil desde la muralla.
Aníbal suspende la invasión durante varios días.
Esto es aprovechado por los ciudadanos de Arse para restaurar la muralla y
fortificar nuevas defensas. Pero , ante Roma, Para Aníbal, el sitio de Sagunto
se ha convertido en una cuestión de honor y llega el momento de cambiar la
estrategia de asalto. Se construyen varias torres de madera más altas que el
muro, y sitúa en ellas numerosos soldados, encaramados y bien guarnecidos del
peligro de las armas arrojadizas. Así, ordena que las torres se aproximen al
muro y abran una brecha en él. Abierta la brecha en un abrir y cerrar de ojos,
los cartagineses consiguen situarse en un sitio muy elevado desde donde
comienzan a colocar catapultas y ballestas formando una especie de castillo en
la misma ciudad y continúan su avance por la parte de la ciudad más arruinada.
Los ciudadanos de Arse construyen con los escombros otra muralla a espaldas de
la ciudad reduciendo su recinto y defendiéndose como pueden del avance cartaginés.
Asolada la mayor parte de la ciudad y ante la falta creciente de víveres, los
ciudadanos de Arse pierden la esperanza de la ayuda romana y deciden resistir
como se pueda los embites de las fuerzas de Aníbal. los ciudadanos de Arse
proponen una rendición honrosa que no es aceptada por Aníbal. Éste impone las
suyas con brutales consecuencias para los ciudadanos. Entre las condiciones
impuestas destaca : entrega de todo
el oro y la plata que poseen y el abandono de la ciudad con sólo dos
vestiduras. Finalmente, los ciudadanos de Arse optan por la máxima "morir
antes que entregarse" y deciden montar una pira inmensa, llena de objetos
valiosos, prendas, piedras preciosas, vasos sagrados de los templos, plomo y
bronce para deteriorar completamente el oro y objetos de valor, prendiendo fuego
al conjunto en
An
Así queda Arse después de ocho meses ininterrumpidos
de asedio y bloqueo continuado. Esto marcó el inicio de