Después
de la edición especial de la trilogía galáctica, de
la que pudimos disfrutar en 1997, ya hay gente que vuelve a tener el mono
de aventuras espaciales de calidad y fantasía y dejarse de meras
imitaciones. Paciencia que ya falta poco para que llegue a nuestras pantallas
Starwars: The Phantom Menace (La amenaza fantasma), que así se llamará
la primera parte de la nueva trilogía. Por lo pronto, ya hay fecha
de estreno en EE.UU. y Canadá: el 21 de mayo de 1999.
Por si hay
alguien que todavía no se haya enterado, el universo Star Wars,
creado hace más de veinte años por George Lucas, se articuló
en nueve episodios. Las tres películas que todos conocemos, protagonizadas
por Luke, Leia, Han Solo y compañía, cubren los episodios
cuatro al seis, mientras que la nueva trilogía en preparación
abarca los tres primeros capítulos de la saga. Lucasfilm, la todopoderosa
productora del inquieto Lucas, ha cuidado al máximo hasta el último
de los detalles, aunque algún intrépido navegante ha conseguido
infiltrar documentos secretos acerca de la nueva entrega. Nada debe fallar
ahora que el tiempo y el dinero no son un problema para este visionario
realizador. El rodaje se ha mantenido en un absoluto secretismo y los detalles
se dan con cuentagotas, principalmente a través de internet, mediante
la excelente página oficial de Starwars.
La nueva
película se encargará de contarnos la evolución del
caballero jedi Anakin Skywalker desde su niñez hasta su caída
en el lado oscuro de la fuerza, que desembocaría en el enfrentamiento
definitivo con su mentor Obi-Wan Kenobi y la asunción de un nuevo
nombre e identidad: Darth Vader. Con estas perspectivas, la historia se
antoja mucho más sombría y siniestra que la trilogía
preexistente, aunque eso no tiene por qué ser necesariamente malo.
Lo complicado, realmente, es entrar en detalles argumentales. El primer
episodio, por ejemplo, narra la niñez de Anakin Skywalker y su primer
contacto con su maestro jedi pero, por otra parte, también ofrecerá
una perspectiva general del universo Star Wars, como los primeros pasos
de lo que sería el posterior gobierno imperial o el inicio de la
decadencia de la orden de caballeros jedi. Si toda este aluvión
de nombres, datos y demás parafernalia estelar no te resultan familiar,
no te preocupes: la esencia de las nuevas películas promete mantener
ese espíritu aventurero y fantástico que caracterizó
a las anteriores y que hace que, aún hoy, miles de adolescentes
(y no tanto) sueñen con pilotar un X-wing o con encontrarse a Leia
en el Palacio de Jabba el Hutt.
EL
POSTER DE LA PELÍCULA.