Joaquín
Sabina

de bar en bar...





"Ya no cierro los bares ni hago tantos excesos,

cada vez son mas tristes las canciones de amor".

Joaquín Sabina
Camas Vacías
Dímelo en la calle
(2002)



Joaquín Sabina siempre ha sido un gran amante de los bares. Como ha declarado en muchas ocasiones, le encantaba "perder el tiempo gloriosamente" apoyado en la barra de un bar, con una libreta en la mano y aguantando las épicas historias del borracho de turno. Si alguien conocía el mundo noctámbulo de los bares ese era Joaquín.

Sin embargo, en la actualidad, ya no sale tanto -sobretodo, desde que trasladó el bar a su propia casa- sino que esa afición forma parte, más bien, de la imagen caricaturesca que él mismo se ha encargado de crear y difundir. Ahiora, mucho más calmado, se dedica a leer, a escribir o a consumir impulsivamente telebasura, eso si, acompañado siempre de un buen escocés y algún que otro cigarrillo. fruto de la nostalgia que siente por ellos, y como homenaje, incluyó en su libro de sonetos Ciento volando de catorce uno dedicado a todos aquellos bares que han hecho historia en su vida.

--BARES--

Complot, champú, les deux magots, la biela,
morocco, el rinconcillo, los cabales,
alexis, bienvenido, el sol, dandela,
magic, la bovia, flash, los inmortales,

la aurora, la mandrágora, el molino,
el café comercial, el candelero,
la buhardilla, el pastós, el rey del vino,
el oasis, el plata, el burladero.

tenampa, los grabieles, la oficina,
el avión, la mordida , el piano bar,
zambra, la noche, satchmo, la cantina

san luis, el floridita, la taberna,
troubadour, la comanche, el paladar,
la luna, el chino, clásica y moderna.







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