Drácula en la literatura
                                                    "De la tumba yo me he levantado/
                                                     a buscar mi prometido bien,/
                                                para hallar al hombre por mi amado/
                                                     y beber la sangre de su sien./
                                                             Cuando ocurra así/
                                                             yo me iré de aquí/
                                                a buscar otros hombres también..."
                                                   La novia de corinto, J.W.Goethe

    Como ya vimos, Drácula no fue la única muestra de literatura vampírica. A pesar de que durante el medievo , bajo la fuerte influencia del cristianismo, se trató de terminar con todo lo relacionado con el tema, el folklore y las historias sobre vampiros hicieron perdurar la leyenda a lo largo de siglos. Así, en pleno siglo de la razón se llegó a discutir, en muy cultas reuniones, sobre la existencia real de estos seres.
     Posteriormente, la creciente exacerbación religiosa que acompañó al Romanticismo, hizo que muchos escritores alemanes se basasen en antiguos relatos , reales o no, para dar rienda suelta a su imaginación: El holandés Gérard Van Swieten, profesor de la Universidad de Viena y médico personal de la emperatriz María Teresa , escribió el "Informe médico sobre los vampiros"(1725).
     Johann Wolfgang Von Goethe, escribió en 1797, la bella balada titulada "La novia de Corinto". En el mismo año, el poeta británico Samuel Taylor Coleridge compuso el poema Christabel, que también se basaba en el tema.
     En 1818, Lord Byron y su grupo de amigos se reunieron, como una de tantas veces durante su veraneo a orillas del lago Lemán, y durante una inspirada velada nocturna , surgieron las ideas que darían lugar a las obras Frankenstein o el moderno Prometeo , y "El Vampiro", que aunque fue escrito por el doctor John William Polidori, fue publicado inicialmente, en 1819, por la revista New Monthly Magazine como una historia de Lord Byron. Sin duda Byron era en su época muy interesante para los potenciales lectores, pero Polidori nunca le llegó a perdonar por esta, que no fue más que otra de las humillaciones a las que lo tenía acostumbrado. En "El Vampiro", Polidori creó a Lord Ruthven, un vampiro aristocrático, enigmático y de gran éxito con las mujeres.
      En 1840, James Malcom Rymer se descuelga con "Varney The Vampire or The Feast of Blood" (Varney el Vampiro o la Fiesta de la Sangre), donde el vampiro Francis Varney se divierte de lo lindo en medio de sangre,gritos, muertos y cosas por el estilo.
      Hasta Charles de Baudelaire, en 1857, se le animó al tema, cuando escribió "Las metamorfosis del Vampiro".
      Por su parte Joseph Sheridan LeFanu con "Carmilla", una novela corta con marcado carácter gótico escrita en 1872, fue una de las fuentes del Drácula de Stoker, y muchos consideran que literariamente es muy superior a éste. La vampira Carmilla acosará a la joven dama que le dio alojamiento en su castillo, configurando una curiosa historia de amor lesbico, donde lo que se insinúa resulta mucho más inquietante que lo que se dice. En alguna ocasión Stoker declaró que la lectura de "Carmilla" le había asombrado profundamente. Guy de Maupassant, en "Le Horla" (1887), creó un vampiro invisible que cuando se manifiesta es una masa informe que bebe la vida de los seres humanos. El prolífico Edgar Allan Poe atacó con "Berenice"; el ruso Tolstoi fue el autor de la escalofriante "La familia del Vurdalak" (1884) y Gogol, compatriota suyo , partiendo del folklore ucraniano desarrollo un precioso cuento llamado "El Viyí".Tampoco podemos olvidarnos de "El Parásito", de Arthur Conan Doyle.
      Entrando en el siglo XX podemos citar al relato de Robert Bloch, "El Vampiro Estelar" (1935) y su continuación "El Morador de las Tinieblas", de ese mismo año, escrita nada menos que por Howard Philips Lovecraft, como una suerte de devolución de atenciones.
      Muchos años después, en 1975, aparece Salem`s Lot (La Hora del Vampiro o Las Brujas de Salem), de Stephen King.Después vino el turno de Anne Rice. Nacida en Nueva Orleans en 1941 con el nombre de Howard Allen O'Brien, se casó con Stan Rice en 1961. En la primera novela sanguinolenta de Rice, "Entrevista con el vampiro" (1976, adaptada al cine en 1994, por Neil Jordan), un vampiro cuenta su vida introduciendo así al lector en la historia y la cultura de sus semejantes. Este libro es el comienzo de las Crónicas vampíricas, una saga que presenta un retrato compasivo de los vampiros como seres románticos que viven alejados de las convenciones sociales. El resto de la serie está compuesta por Lestat el vampiro (1985), La reina de los condenados (1988), El ladrón de cuerpos (1992) y La voz del diablo(1995). El punto de vista de las novelas no es el de la víctima, sino el del vampiro. Los personajes de Rice buscan, a través de escenas muy plásticas, su propia identidad dentro de la subcultura vampírica, en la que el sexo y la muerte aparecen a menudo entrelazados. El homoerotismo, la inmoralidad, el ateísmo y la reflexión sobre la naturaleza esencial del bien y el mal están también presentes en las crónicas.

(extraido de:www.quintadimension.com/literatura/dracula.shtml)

Otros artículos también relacionados con la figura del vampiro en la literatura son los siguientes:
www.members.tripod.com/~Baron91/StokerBram.html
//granavenida.com/webdelvampiro/vlitera00.htm

Vampirismo    Literatura   Cine    Teatro   First Paper    Relatos   Dibujos