-Presentan un lenguaje nulo o casi nulo. No se inmutan a los sonidos, parecen estar en su mundo ajenos al resto.
-Muestran ecolalia, es decir, repiten lo mismo que escuchan. Además, suelen seguir los mismos patrones para llevar a cabo alguna acción.
-Evitan socializarse con niños, el contacto visual y el contacto físico (no les gusta que les toquen). No se interesan por su entorno.
-Suelen mirar a un punto fijo y se ríen sin tener ningún motivo. Además, se mecen sobre sí mismos y suelen andan de puntillas.
-No responden a su nombre y no pueden expresar aquello que quieren.
-Tienen un apego extraño por algún juguete y por ello lo suele llevar encima. Tienden a colocar los objetos en fila.
-Tienen un comportamiento hiperactivo/a, no cooperador/a u oposicionista y, normalmente, tienen rabietas.