a famosa Ciudad Esmeralda, casa del gran Mago de Oz, era aún
más brillante
y grandiosa de lo que imaginaban. Sabiendo que la buena Hada
del Norte les
enviaba, los habitantes ayudaron a Dorothy, al espantapájaros,
al hombre de
hojalata y al león, a arreglarse un poco para ver al mago.
Cuando lo consiguieron, el mago les dijo que les concedería sus
deseos.
Sin embargo, había una condición: tenían que obtener la varita
de la Bruja
del Oeste. Lo que significaba luchar contra ella y vencerla.