LENGUAJE

    Debemos considerar el lenguaje como una de las funciones fundamentales que intervienen en el desarrollo cognitivo del individuo.

    El niño con síndrome de Down presenta una serie de trastornos que afectan al habla (respiración, voz, ritmo, articulación…), como al lenguaje, el cual implica funciones intelectuales superiores que van desde la estructuración del pensamiento, hasta la intencionalidad de comunicar.

 

¿Qué se ha de hacer?

1.          Orientar a los padres es fundamental ya que el lenguaje forma parte de cada momento de la vida del niño. Unos padres colaboradores y bien informados tienen a su disposición un gran variedad de medios y actividades para enriquecer el mundo sonoro y vocal, y para motivar e interesar al niño en los componente de interacción y comunicación que los acompañan.

2.    Es necesario prestar gran atención a los resfriados e infecciones para tratarlas adecuadamente, previniendo y evitando así complicaciones como otitis reiteradas que acaban dañando el oído medio y terminan pérdidas auditivas.

3.      La educación fonatoria y articulativa corresponden fundamentalmente al logopeda y personal especializado.

4.     A nivel semántico se trabajarán las nociones de objetos y acciones manipulando y verbalizando el material ante el niño; se multiplicarán todos los ejercicios de discriminación y manipulación mediante mimo, dibujo y juego.

5.              Interesar al niño por las relaciones entre personas y las cosas de su entorno.

6.      Se trabajará en la expresión primero de mensajes elementales de dos palabras para explicar las relaciones semánticas observadas, alargando después progresivamente estas construcciones.